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Sanidad madrileña Sábanas con pis, heces, moho y pelos en los hospitales de Madrid tras la privatización del servicio de lavandería

Los excrementos y el mal estado de la lencería es un habitual que los trabajadores llevan criticando desde 2013, cuando el gobierno de Esperanza Aguirre privatizó este servicio, pero se ha intensificado en los últimos dos meses.

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Imagen de archivo de una sábana con manchas suministrada por la lavandería central al Hospital Clínico./ MOVIMIENTO ASAMBLEARIO DE TRABAJADORES DE LA SANIDAD

MADRID, Actualizado:

Restos de pis, heces, moho, sangre y pelos pegados. Esto es lo que se encuentra el personal y los pacientes de los hospitales de la Comunidad de Madrid en las sábanas y en la ropa que llega cada día desde el servicio de lavandería, según ha adelantado Cadena Ser. Los excrementos y el mal estado de la lencería es un habitual que llevan criticando desde 2013, cuando el gobierno de Esperanza Aguirre privatizó este servicio, pero se ha intensificado en los últimos dos meses, según ha denunciado la portavoz del sindicato MATS, Mar Coloma, en declaraciones al citado diario. "Lo peor de todo es que pese a conocer el mal funcionamiento de la adjudicataria, el Servicio Madrileño de Salud  prorrogó el contrato dos años más", ha lamentado. 

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"Se me cae la cara de vergüenza al abrir una sábana y encontrar manchas de pis, de Betadine, o verla tan rota que no vale ni para trapos"

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Los hospitales de la comunidad se han llenado de carteles que denuncian esta situación y piden explicaciones y soluciones a los gerentes. "Te encuentras ropa sucia, por ejemplo, cuando vas a preparar un quirófano. A mí se me cae la cara de vergüenza al abrir una sábana y encontrar manchas de pis, de Betadine, o verla tan rota que no vale ni para trapos", señala una trabajadora del Hospital Ramón y Cajal en declaraciones al citado medio. Además, otra empleada indicado que ayer al hospital de La Paz llegaron "solo 400 sábanas" para las más de mil camas que tiene. 

Desde la Consejería de Sanidad aseguran que no existen quejas específicas, pero según sus propias auditorias, el 35% de la ropa que sale de la lavandería central se encuentra en un estado 'no utilizable'. Estos controles se realizan cada tres meses y en los tres últimos, a los que ha tenido acceso Cadena Ser, se concluye que "la ropa que reciben los hospitales no tiene la calidad requerida" y que el resultado del trabajo realizado en la misma "se mantiene alejado de unos índices aceptables.
Sanidad dice que estos datos corresponden a auditorias de 2018. "Las auditorías sí detectan un porcentaje de ropa que no llega en estado adecuado, aunque es detectada y sustituida", agregan.

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A pesar de ello, la concesionaria no ha sido sancionada desde 2015. El motivo es que solo existe posibilidad de sanción cuando el Índice de Calidad Externo sea inferior al 55%. Es decir, la empresa puede enviar la mitad de la lencería a los hospitales en mal estado sin recibir ningún tipo de advertencia o amonestación.

Sanidad admite las incidencias

La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha reconocido este jueves estas incidencias en algunos hospitales con la calidad de la limpieza de la ropa de camas, de pacientes y de empleados. Así lo han reconocido fuentes de la Consejería en respuesta a la denuncia de los empleados de los hospitales públicos. Aunque señalan que no hay ninguna "incidencia específica global",  sí reconocen los problemas que han surgido en algunos centros hospitalarios, como en el Ramón y Cajal. Estas incidencias han sido comunicadas a la concesionaria, que ha aducido "problemas puntuales en una de sus plantas" que se están solucionando.

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Sanidad añade que, según sus auditorías, alguna cantidad de ropa hospitalaria regresa a los hospitales "defectuosa" o en estado "no adecuado" y que en esos casos es devuelta y sustituida. La Consejería hace un "seguimiento permanente" de la ropa que llega a los hospitales y exigirá mejorar la calidad del servicio externalizado de lavandería en el contrato nuevo que licitará cuando venza el actual, en noviembre próximo, y en cuyos pliegos ya trabaja.

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