La Junta apunta a la mano del hombre como causa de los fuegos de Ávila, Burgos y Zamora

La Junta de Castilla y León ha trasladado que, según los primeros indicios, la causa de los fuegos de Burgos, Zamora y Ávila sería la mano "intencional e imprudente" del hombre en lugares y día de tan "extrema peligrosidad", de manera que "no son espontáneos.

En concreto, se trata de un incendio en la localidad abulense de San Juan de la Nava, otro en la burgalesa Quintanilla del Coco, que ha llevado a desalojar a Carazo, Villanueva de Carazo, Hacinas, Santo Domingo de Silos y Santibáñez del Val, y el tercer fuego es en el municipio zamorano de Vegalatrave, que ha obligado a desalojar Losacio, Márquiz de Alba, Olmillos de Castro, Losilla, San Pedro de las Cuevas y Navianos de Alba, si bien no se descartan nuevos desalojos de poblaciones por seguridad.

Asimismo, fuentes de la Consejería de Medio Ambiente confirmaron este domingo a través de Twitter que el voraz incendio de Burgos, el nuevo de Vegalatrave (Zamora) y el de San Juan de la Nava (Ávila), los tres fuegos declarados este domingo por la tarde, "podrían haber sido provocados por personas de forma intencional o imprudente".

"Hay desalmados que chiscan el monte y están poniendo en peligro nuestros bienes, nuestras vidas y nuestra manera de ser", ha lamentado este lunes el consejero de Presidencia de la Junta de Castilla y León, Jesús Julio Carnero, quien ha pedido la colaboración ciudadana y de la Guardia Civil para detener a los que han provocado los últimos incendios declarados en las provincias de Ávila y Zamora, y que han prendido fuego "de manera tan terrible y tan terrorista".

Por su parte, la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Junta de Castilla y León, Isabel Blanco, ha asegurado que los que han prendido los últimos fuegos "va a hacer daño al territorio y a las personas". También, ha reclamado la colaboración de los vecinos de la zona para intentar identificar a los que prenden "el monte, el bosque y nuestros pueblos", ha señalado.

Cabe destacar que, según la organización ecologista Greenpeace, hasta el pasado viernes ya han ardido más de 200.000 hectáreas solo en 2022. En esta línea, destaca que en más de un 96% de los incendios de causa conocida en España está ocasionada por el ser humano.

Detenido tras provocar siete incendios en Mallorca

Por otro lado, un hombre de nacionalidad alemana ha sido detenido como presunto autor de un delito de incendio tras haber provocado hasta siete fuegos este fin de semana en el municipio mallorquín de Calvià y sus alrededores, algunos en zona forestal de alto riesgo por las elevadas temperaturas.

La detención ha sido posible después de que, tras varios incendios muy próximos, se estableciera un dispositivo conjunto de vigilancia en el que han participado guardias civiles de Calviá y especialistas del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), policías locales y agentes de Medio Ambiente, ha informado el instituto armado en un comunicado.

El sábado por la tarde se declararon tres incendios en fincas consecutivas del camino de Son Pillo, donde se quemaron únicamente 600 metros de matorral por la rápida actuación de los servicios de emergencia.

El domingo por la mañana se produjeron dos incendios más, el primero en una alpaca en una finca de la carretera de Es Capdellà a Puigpunyent, una zona forestal y considerada de alto riesgo por las altas temperaturas del fin de semana; y el segundo en la avenida Santa Ponça, sofocados ambos sin mayores consecuencias. Una vez iniciada la investigación y después de haber recogido muestras en el lugar de los incendios, hubo otros dos fuegos más en los alrededores de Santa Ponça, que fueron extinguidos por los Bomberos de Mallorca.

Ante esta situación, se estableció un dispositivo de vigilancia formado por guardias civiles de Calviá y del Seprona, policías locales y agentes de medioambiente, que dio resultados: a mediodía del domingo, un agente forestal vio un coche huir a gran velocidad del camino de Son Pillo, después de que el conductor advirtiera su presencia. La Policía Local de Calvià lo interceptó en uno de los controles conjuntos y fue detenido por la Guardia Civil, que registró su vehículo.