Inmigración Deportado del CIE de Aluche un joven marroquí tras varios intentos de suicidio
Se trata de una persona de 23 años que llegó a España a los 14, según SOS Racismo. Tras ser detenido en un control de identidad, trató de suicidarse en comisaría. Volvió a intentarlo al ser devuelto al CIE después de fugarse. No recibió atención psicológica, denuncia la organización
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madrid,
La organización SOS Racismo Madrid ha alertado de que un joven marroquí ha sido deportado desde el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Aluche tras varios intentos de suicidio sin recibir atención pisicológica.
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En un comunicado, la organización ha explicado que la misma semana en que el Ministro del Interior anunció la construcción de tres nuevos CIE, "tuvieron conocimiento de la tentativa de suicidio y posterior deportación de una persona desde el CIE de Aluche".
Se trata de Karim (nombre ficticio), un joven de 23 años que llegó desde Marruecos cuando tenía 14 años. "Tras nueve años viviendo en España se podría decir que era un vecino más si no fuese por el hostigamiento policial al que estaba acostumbrado mediante los controles de identidad y la negación constante de oportunidades", ha apuntado la organización, para explicar a continuación que según el testimonio del joven, "en uno de estos controles el pasado mes de marzo, fue detenido y trasladado a la comisaría donde intentó suicidarse".
Se fugó del CIE y, tras ser encontrado e internado de nuevo, intentó suicidarse por segunda vez
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Tras su detención, SOS Racismo ha criticado que solicitaron su internamiento en el CIE, desde donde se fugó el pasado marzo al "no poder soportar la idea de ser deportado a un país del que se marchó cuando todavía era un niño". "Fue encontrado y llevado de vuelta al centro donde intentó suicidarse por segunda vez", han declarado.
Según relató el joven a la organización, "tras esta tentativa fue aislado y se le restringieron las visitas, tanto de familiares como de las organizaciones de apoyo". Tras el intento de suicidio, "Karim fue trasladado al hospital para recibir una valoración desde los servicios de Salud Mental pero no recibió apoyo psicológico durante los días posteriores ya que los CIE carecen de este servicio". Sin embargo, "también fue deportado tras pasar varios días aislado".
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"Es un chico con una gran voluntad de vivir, pero no aguantaba más esta persecución por ser migrante", han declarado algunos de los activistas de la organización que visitaban al chico, al tiempo que han insistido en que "el chico les dijo que el sistema no le deja vivir".
Por ello, desde la organización han criticado "el diseño de los CIE" el que han tildado de "espacios de sufrimiento, opacidad e impunidad". "El caso de Karim documenta además cómo la aceleración de las deportaciones se utiliza como método para acallar las constantes vulneraciones de derechos en los CIE", denuncia SOS Racismo.
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"La construcción de nuevos CIE en España no hace sino incidir en un modelo que vulnera los derechos humanos, civiles y políticos", ha apostillado la organización a la vez que han reiterado que "la única alternativa a los CIE es su cierre". "Desde las organizaciones de defensa de derechos se seguirá trabajando por el cierre de los CIE y el fin de las deportaciones", han asegurado