El forjado del suelo de un aula de infantil, situada en la planta baja del colegio público Rey Pelayo de Gijón, se ha desprendido provocando su derrumbe, sin que por ello se hayan producido daños personales, dado que el incidente se ha producido en horas no lectivas.

La directora del centro educativo, Pilar Álvarez, se ha encargado de confirmar la información. Según la docente, fue el personal del servicio de atención temprana encargado del comedor quien dio la voz de alarma a los responsables del colegio.

Álvarez ha querido hacer hincapié en que, por suerte, los niños no habían llegado a entrar al colegio y a los que ya estaban se les mantuvo en el patio hasta que sus familias vinieron a recogerlos, "con todas las medidas de seguridad", ha recalcado.

Asimismo, Álvarez ha agradecido la comprensión que han mostrado las familias tras el incidente, así como el "apoyo total" del que han hecho gala. Además, la directora ha subrayado el comportamiento del profesorado para poner sobreaviso a las familias. Cabe recordar que en el aula afectada estudian diez alumnos de tres años y en todo el centro 200.

"No ha habido peligro en ningún momento", ha asegurado. "Se ha quedado en un susto, muy gordo, pero un susto", ha recalcado, al tiempo que ha confesado que le vino a la mente lo ocurrido en enero de 2022 en el colegio gijonés San Vicente Paúl, donde cedió el suelo de una terraza y causó la muerte de dos obreros, mientras que otros dos resultaron heridos.

Ha señalado, además, que el colegio es "antiguo" y está pendiente de obras para hacer un "súper cole", dentro de un proyecto financiado con fondos europeos, si bien no entraría en el mismo este aula inicialmente.

Educación realojará a los alumnos

La consejera de Educación del Principado, Lydia Espina, ha comunicado este jueves que las clases en el colegio público gijonés Rey Pelayo quedarán suspendidas también este viernes.

Al tiempo, ha anunciado que se reubicará a los alumnos en otros colegios hasta que se garantice la seguridad de la vuelta a las aulas. En total son 200 alumnos los que habrá que realojar en otros centros.