La Fiscalía de Maryland (Estados Unidos) ha publicado este jueves un informe que documenta los abusos sexuales a menores cometidos por la Iglesia en la Arquidiócesis de Baltimore. El texto señala a 156 miembros del clero y sitúa en 600 el número de víctimas. Según la autoridad judicial, los delitos se han cometido de forma reiterada durante las últimas ocho décadas.

"Desde 1940 hasta 2002 más de un centenar de sacerdotes y otros empleados de la arquidiócesis incurrieron en horrendos y repetidos abusos contra los niños más vulnerables en sus comunidades", señala la Fiscalía, que publica este documento sin destapar los nombres de los acusados. Entre los supuestos abusadores se encuentran decenas de curas, frailes e incluso dos religiosas.

Para los magistrados, "la abrumadora extensión del abuso mismo revela la culpabilidad de la jerarquía de la Iglesia", que no reconoce su responsabilidad. El fiscal general del estado, Anthony Brown, asegura que en 2018 su oficina comenzó a investigar este caso. La comunidad eclesiástica de Baltimore cuenta con 518.000 fieles y casi 150 parroquias.

"La investigación examinó las denuncias sobre crímenes por abusos sexuales a menores perpetrados por miembros del clero, seminaristas, diáconos y otros trabajadores", subraya el fiscal. La Arquidiócesis de Baltimore, al oeste de Maryland, emplea a 550 sacerdotes, 160 diáconos, 55 frailes y 803 monjas. Asimismo, administra cinco hospitales, una treintena de residencias de mayores y varias escuelas diocesanas.

La Fiscalía también precisa que los dirigentes de la Iglesia trataron de ocultar y encubrir dichos abusos "con cientos de miles de documentos" que datan de las fechas examinadas. Antes de que el informe saliese a la luz, el arzobispo de Baltimore, William Lori, difundió un mensaje instando a los católicos a rezar por los supervivientes de los abusos.

"Más que nada, en este momento hago una pausa para reconocer y validar que el abuso vil y horrible sujeto a la investigación de la Fiscalía representa una traición grave, que ha tenido consecuencias devastadoras para las víctimas", sentenció el prelado.

Por su parte SNAP, la mayor red de supervivientes de abusos sexuales por parte del clero, ha emitido un comunicado para denunciar que "el informe de la Fiscalía contiene más nombres de abusadores que los que habían revelado los funcionarios de la Iglesia", razón por la que pide a los representantes de la arquidiócesis explicaciones de "lo que han ocultado y por qué".