Este artículo se publicó hace 2 años.
¿Cómo cambiaría el proyecto de ley trans si se aprueban las enmiendas del PSOE?
Los socialistas han presentado en el Congreso 37 modificaciones al texto, pero solo una de ellas es innegociable para las partes y levanta ampollas por igual en Igualdad, en las organizaciones LGTBI y en parte del feminismo.
Marisa Kohan
Madrid-Actualizado a
La aprobación de la conocida como ley trans sigue trayendo de cabeza al Gobierno de coalición. Una norma impulsada por el Ministerio de Igualdad que fue asumida por el Ejecutivo y que provocó durante su proceso de tramitación algunos de los enfrentamientos más duros entre los socios de Gobierno. Pero no solo. Este proyecto de ley, que se está tramitando ahora en el Congreso, ha abierto también una seria brecha dentro del propio Partido Socialista a lo largo de los últimos dos años y dentro del propio movimiento feminista. Lejos de estar cerrada, estas discrepancias siguen abiertas.
En la mañana de este lunes, la ministra de Igualdad, Irene Montero, afirmó en un programa de Televisión Española que no había acuerdo con sus socios de Gobierno, que los socialistas les habían comunicado que mantenían sus enmiendas a la ley, que "no quieren un acuerdo" e incluso que PSOE y PP podrían "decidir un recorte de derechos en la ley trans".
Poco después, la ministra de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, respondía a las palabras de Irene Montero, afirmando que el Partido Socialista "presentó una enmienda para reforzar la seguridad jurídica de los menores trans". "Cualquier otro comentario o consideración está fuera de lugar. El PSOE promueve esta legislación y tiene que mirar cualquier elemento que pueda perjudicar la seguridad jurídica de la ley", afirmó. La responsable socialista explicó que aún quedan muchos avances que conquistar en favor del colectivo LGTBI (el cual, tradicionalmente, no ha visto sus derechos en igualdad con el resto de colectivos de la sociedad), y que necesita una ley como la que va a promover el Gobierno, que supondrá avances impensables hace siete u ocho años y confirmarán a España como uno de los países más vanguardistas, más pioneros en materia LGTBI. Sobre el eventual apoyo del PP a las enmiendas promovidas por su partido, María Jesús Montero afirmó que no puede hablar por los populares, que "siguen en la política de desgaste permanente , trasladando en todos los temas bronca y crispación".
Fuentes de Igualdad afirman a este periódico que hace tres semanas remitieron al PSOE una propuesta de acuerdo a la que no han recibido ninguna respuesta hasta la fecha, salvo la negativa a retirar las enmiendas.
Desde el Partido Popular no confirman que vayan a apoyar las enmiendas del PSOE. Fuentes del partido recordaron a Público que los populares están en contra de esta ley y que ya presentaron una enmienda a la totalidad, por lo que sería extraño que apoyaran las enmiendas socialistas. "No queremos que se apruebe esta ley. No la consideramos oportuna ni tiene el consenso social suficiente", añaden fuentes del partido.
¿Qué pide el PSOE en sus enmiendas?
Tal como se ha comentado, el Partido Socialista presentó una batería de 37 enmiendas. De ellas, una es la clave principal de la discordia: la que afecta a la forma en que los menores entre 14 y 16 años pueden acceder al cambio de sexo en el Registro Civil. Según el texto salido del Consejo de Ministros en junio pasado y que ahora se debate en el Congreso, los menores entre 14 y 16 años pueden acceder a ese cambio solo con su manifestación y el acuerdo de sus progenitores o tutores legales. El Partido Socialista propone ahora que este cambio sólo pueda realizarse mediante jurisdicción voluntaria; es decir, si lo decide un juzgado. Esta modificación supone tocar una de las piezas claves para Igualdad y para las organizaciones LGTBI que apoyan la norma.
La propuesta socialista supondría que los menores entre los 12 y los 16 años solo podrían acceder la libre elección de sexo si así lo acuerda un juez. A esto es a lo que los socialistas llaman "mejorar la seguridad jurídica de la norma", algo a lo que no están dispuestos a ceder ni el Ministerio que dirige Irene Montero ni las organizaciones.
El paquete de enmiendas del PSOE tiene otros aspectos que los socialistas quieren enderezar en la norma. Tal como afirmó la exvicepresidenta Carmen Calvo hace unas semanas en un programa de la Cadena Ser, la ley trans que ella acordó con Igualdad y las organizaciones LGTBI en junio de 2021 no es la misma que se aprobó en el Consejo de Ministros en segunda vuelta un año después. Y en algunos aspectos tiene razón. Sin embargo, el artículo sobre la autodeterminación de sexo en los menores que ahora propone modificar el PSOE ya estaba ya en el acuerdo con Calvo.
Además, el proyecto de ley incluye términos como "violencia intragénero" que es otro de los aspectos que los socialistas quieren eliminar. Uno de sus artículos, de hecho, liga esta violencia intragénero a la que sufren las mujeres en el ámbito de la pareja, puesto que propone que las personas LGTBI que sufran violencia en el ámbito íntimo accedan a los beneficios incluidos en la ley de violencia hacia las mujeres de 2004.
No solo el PSOE ha criticado los aspectos de la ley que tratan sobre la autodeterminación del sexo. También parte del movimiento feminista y feministas socialistas han sido muy críticas con la norma. Para muchas, las enmiendas del PSOE son solo una "huída hacia adelante" y una "burla a la inteligencia". Definen como "inaceptable" que el Partido Socialista plantee una "serie de enmiendas cosméticas" sin "tocar la autodeterminación del sexo, es decir, "el núcleo central de discusión de esta ley", y consideran "ruin utilizar la violencia de genero para distraer y evitar abordar los auténticos problemas que tiene".
Otras propuestas
Los socialistas, además, han propuesto un cambio en la forma en la que se puede revertir el cambio de sexo una vez realizado. El texto del proyecto de ley afirma que esto se puede realizar en el propio Registro Civil de la misma forma que se realizó el cambio de sexo, pero el PSOE considera necesario que esta reversión se deba realizar mediante un procedimiento judicial.
En el ámbito del empleo, las enmiendas socialistas proponen eliminar la mención expresa a las personas trans (con especial atención a las mujeres trans) en los planes de igualdad y no discriminación, al tiempo que reclama medidas de acción positiva para la contratación del colectivo.
Si se aceptan las enmiendas socialistas, las empresas de más de 50 trabajadores tendrán un año para adoptar medidas en favor de la igualdad de las personas LGTBI y un protocolo contra el acoso.
También proponen reforzar la atención sanitaria a las mujeres lesbianas y bisexuales, proteger a las mujeres trans en situación de prostitución, concretar el trabajo de los consulados españoles ante los matrimonios de parejas del mismo sexo y definir funciones de la Autoridad Independiente para la Igualdad de Trato y la No Discriminación. Con el objetivo de reforzar la protección del colectivo LGTBI en el ámbito rural los socialistas sugieren en sus enmiendas estudiar el "sexilio", palabra con la que alude a la decisión de muchas personas de abandonar su lugar de residencia ante el rechazo o la discriminación que sufren.
Movilizaciones LGTBI a la vista
Hay otros cambios adicionales que el PSOE quiere introducir en la ley, pero ninguno es innegociable. De hecho, la única propuesta que genera la imposibilidad de un acuerdo es el cambio del sexo registral de los menores. Irene Montero ha advertido que no permitirá ningún cambio que rebaje derechos.
Por su parte, diversas organizaciones LGTBI ya han anunciado manifestaciones en protesta por las enmiendas del PSOE que tocan partes claves de la norma. Aún no han puesto fecha, pero sí que se producirían en los próximos días.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.