El colapso en la Atención Primaria lleva al límite a los hospitales de Madrid: "Temo lo que pueda pasar de aquí a diez años"
El Hospital Universitario Fundación Alcorcón ha amanecido con 11 camas en los pasillos y 26 pacientes en espera de ingreso. Los sanitarios piden un plan de Atención Primaria que evite que los enfermos sean desviados a Urgencias.
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Madrid, Actualizado:
Varios hospitales de la Comunidad de Madrid han amanecido al límite por la altísima presión asistencial y la falta de espacio. Los sanitarios denuncian que la precarización de la Atención Primaria (AP) retrasa diagnósticos y empuja a los pacientes a las Urgencias hospitalarias si quieren remediar sus dolencias. Exigen aumentar el número de médicos de cabecera y pediatras para evitar que los enfermos acaben en los hospitales con sus casos empeorados.
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Tal ha sido la situación del Hospital Universitario Fundación Alcorcón. El centro ha amanecido con 11 camas en los pasillos y 26 pacientes en espera de ingreso en planta porque no quedan habitaciones. Tanto los boxes como las salas de observación están colapsadas. "Es una acumulación de muchos factores, algunos previsibles y otros no tanto. En esta época todos los años surgen brotes de gripe que merman a grupos de mayor edad. Siempre tienen lugar estos ingresos estacionales. Lo malo es que ahora esta demanda se junta con todos los enfermos que no pueden ser atendidos en AP e irremediablemente acaban aquí", explica Ismael Sarrión, enfermero en el centro.
El también representante sindical de CCOO cuenta que incluso este año, contando con cuatro efectivos médicos más, están desbordados. "La gente está llegando con patologías graves porque no han recibido un diagnóstico temprano en sus centros de salud. De modo que ahora tenemos enfermos que antes no teníamos", arguye a la vez que expresa su temor por el futuro de los servicios públicos: "Me da miedo lo que pueda pasar dentro de diez años".
Las cifras de servicio registradas en el Fundación Alcorcón se muestran muy por encima de la media histórica. Si antes atendían a 300 urgencias, ahora se eleva a 400. "Lo no previsible es que un médico de cabecera no te pueda atender. Todas esas citas se tendrían que quedar en los AP pero vienen y no tenemos espacio para poder atenderles. Si se hiciera una buena política de Atención Primaria, esta cantidad de pacientes jamás nos vendrían, los sanitarios estarían bien tratados y los enfermos medicados y en su casa", reprocha Sarrión. El facultativo advierte de que ir a un hospital supone "exponerse al riesgo de contraer enfermedades más graves en comparación con la patología que se padece".
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Otro de los centros que están a un paso de la saturación es el Hospital Infanta Leonor, donde ya hay 46 pacientes en Urgencias pendientes de hospitalización y las plantas están casi llenas, sin perspectiva de mejora. "Cada día es más preocupante la situación de las Urgencias. No cesan de venir pacientes y los profesionales estamos agotados", cuenta Marisa Fernández, enfermera y miembro de CCOO.
Fernández lamenta que "la Consejería de Sanidad no esté dispuesta a que la AP vuelva a su origen natural, que es resolver más del 80% de los casos de urgencia y que no tengan que llegar a los hospitales". Afirma sentirse muy cansada y sospecha que la desorganización que existe interesara para debilitar la sanidad pública. Como Sarrión, sabe que quienes no pueden ser atendidos y pueden permitírselo "acaban pagando por lo privado". Ambos coinciden en que la mayor labor que se puede hacer es expresarlo y hacerlo visible a los ciudadanos. Llaman a sumarse a la manifestación prevista este domingo 12 de febrero.