La marca de ropa deportiva Hummel presentó este miércoles la indumentaria que lucirá la selección de Dinamarca de cara al próximo Mundial de Qatar. La equipación destaca por su sobriedad, una característica que, tal y como ha detallado la marca danesa, busca denunciar la situación de los derechos humanos en el país asiático.

"Con las nuevas camisetas de la selección danesa hemos querido enviar un doble mensaje. No sólo se inspiran en la Eurocopa 92, rindiendo homenaje al mayor éxito futbolístico de Dinamarca, sino que es también una protesta contra Qatar y su historial con relación a los derechos humanos", comunicaba la compañía a través de sus redes sociales.

Los nuevos diseños son mucho más contenidos, tanto el escudo como sus característicos chevrons –los icónicos galones en forma de uve– lucen atenuados, como si se camuflaran con la gama cromática de la equipación. "No queremos ser visibles durante un torneo que ha costado la vida a miles de personas", detalla Hummel.

"Apoyamos a la selección danesa hasta el final, pero eso no es lo mismo que apoyar a Qatar como país anfitrión. Creemos que el deporte debe unir a la gente y cuando no lo hace queremos hacer una declaración", prosigue el comunicado.

El equipo danés, emparejado en la primera fase con Francia, Túnez y Australia, vestirá en la Copa del Mundo tres camisetas, una primera equipación íntegramente roja, una segunda blanca y una tercera totalmente negra.

"El color del luto. El color perfecto para la tercera camiseta de Dinamarca para el Mundial de este año. Queremos hacer una declaración sobre el historial de derechos humanos de Catar y el trato que da a los trabajadores inmigrantes que han construido los estadios del Mundial", zanja su misiva la marca deportiva danesa.

Qatar rechaza la protesta

Por su parte, el Comité Supremo (SC) de Qatar 2022 ha rechazado que se trivialice su "compromiso de proteger la salud y la seguridad de los trabajadores que han construido los estadios del Mundial".

Un portavoz del SC ha asegurado que desde que su país  ganó el derecho a organizar el Mundial "ha trabajado diligentemente junto al gobierno catarí para garantizar que el torneo deje un legado social duradero" y que su "compromiso" con ese legado "ha contribuido a la realización de importantes reformas en el sistema laboral, promulgando leyes que protegen los derechos de los trabajadores y garantizando la mejora de sus condiciones de vida".

Si bien múltiples organizaciones internacionales niegan la versión del Comité Supremo qatarí. Los diferentes datos publicados hablan de más de 6.000 fallecidos en las obras de sedes e infraestructuras y reiteradas violaciones de sus derechos laborales.

A pesar de las reformas laborales introducidas por el país catarí, las organizaciones denuncian que no se cumplen con las medidas establecidas. Tampoco consideran suficientes las medidas adoptadas por la FIFA, quien solo ha cubierto las necesidades de los trabajadores de sus sedes oficiales, sin tener en cuenta los que han participado de la preparación del torneo en los trabajos de otras infraestructuras necesarias para su celebración.