La reunión este viernes del sector progresista del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para debatir si proceden a su dimisión para así forzar la renovación del órgano del gobierno de los jueces se ha centrado en los "posibles escenarios y las posibilidades y consecuencias jurídicas de nuevas renuncias [tras la de Concepción Sáez], en todo caso, individuales y no colectivas". 

La reunión, que continuará el martes a las 19 horas en la sede del CGPJ, ha contado con la presencia de Concepción Sáez, cuya dimisión deberá ser aceptada por el presidente del Consejo en el pleno del día 30 de marzo, Clara Martínez de Careaga, Rafael Mozo (presidente suplente), Álvaro Cuesta y por videoconferencia, Pilar Sepúlveda; se han ausentado tres vocales progresistas por motivos de agenda. 

Muy presente ha estado en el cónclave progresista del CGPJ la posible imposibilidad de una dimisión en bloque, según apuntas fuentes del sector conservador, a tenor del artículo 409 del Código Penal. Este artículo indica que "las autoridades o funcionarios públicos que meramente tomaren parte en el abandono colectivo o manifiestamente ilegal de un servicio público esencial y con grave perjuicio de éste o de la comunidad, serán castigados con la pena de multa de ocho a doce meses". 

No obstante, hay que tener en cuenta que los 18 vocales actuales del Consejo tienen el mandato caducado desde hace más de cuatro años, una situación en la que la simple salida o renuncia individual estaría justificada. De momento, entre los progresistas hay consenso en que "la dimisión es algo más que una hipótesis" y que "puede ser la salida a esta crisis", que dura cuatro años y cuatro meses por la falta de consenso político para la renovación. 

La posibilidad de un goteo de dimisiones entre los ocho vocales del sector progresista es lo que se tiene que decidir el martes, antes del pleno del día 30, en el que los vocales conservadores, que son diez y mayoritarios en el Consejo, expondrán sus reticencias a dimitir para forzar la renovación del CGPJ. 

El asunto es complejo y requiere la unión del bloque progresista, según indican a este medio fuentes del CGPJ. Según el artículo 600.4 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, "para la válida constitución del Pleno será siempre necesaria, como mínimo, la presencia de diez Vocales y el Presidente". Precisamente son diez los vocales del bloque conservador, pero el presidente suplente, Mozo, es del bloque progresista y en caso de la hipotética dimisión de todo su bloque, él también dimitiría, con lo que no habría quorum suficiente para que el pleno pudiera funcionar.