El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, iniciará la próxima semana, del 27 al 29 de agosto, un viaje por Mauritania, Gambia y Senegal. Lo hace en plena crisis migratoria, especialmente en la ruta que se dirige a Canarias, para reforzar la colaboración con estos países en la lucha contra la migración irregular.

Los desplazamientos estaban fijados desde principios de verano y se han oficializado este lunes. Sánchez se reunirá con los presidentes de los tres países para fortalecer la cooperación que ayude a evitar la llegada de migrantes en pateras a las costas españolas. 

Será la segunda vez en poco más de seis meses que Sánchez viaje a Mauritania, ya que el pasado 8 de febrero se desplazó a ese país junto a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. Allí, anunciaron una ayuda de más de 500 millones de euros para facilitar el progreso del país y frenar la migración irregular. 

"Vamos a fortalecer nuestros proyectos de colaboración ya existentes a través del control fronterizo y vamos a ir ponderando distintas fórmulas para facilitar la migración regular", señaló el jefe del Ejecutivo español.

Sánchez también ha viajado ya a Senegal, último país al que se desplazará en esta gira, pero será la primera vez que lo haga tras la llegada a su presidencia el pasado mes de abril de Bassirou Diomaye Faye.

Allí, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, anunció en junio la firma de un nuevo marco de cooperación con el estado africano de al menos 180 millones de euros en los próximos cuatro años. 

En cambio, el presidente del Gobierno todavía no ha visitado Gambia, pero sí lo hizo Albares. El ministró fijó con el presidente, Adama Barrow, el objetivo de impulsar la migración circular con la contratación personas autóctonas.