El PSN podrá revalidar una mayoría progresista en Navarra, pero depende de la abstención de EH Bildu
UPN consigue 15 escaños, los mismos que obtuvo en 2019 con Navarra Suma. La formación socialista se queda con 11 asientos y su candidata, María Chivite, podría retener la presidencia si reedita el acuerdo de 2019.
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bilbao, Actualizado:
Noche agridulce en las oficinas de UPN. Con un 27,9% de los votos emitidos, los conservadores navarros han logrado 15 escaños en estas elecciones autonómicas, los mismos que obtuvieron en 2019 de la mano de Navarra Suma. No obstante, la historia podría repetirse en términos prácticamente idénticos a los de esas últimas elecciones: el PSN, con 11 escaños (20,8%), tiene en su mano la reedición del acuerdo que llevó a María Chivite a la Presidencia.
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El escenario se plantea en términos muy parecidos. Para mantenerse en el Gobierno, la representante socialista volverá a necesitar el apoyo de Geroa Bai y Contigo Zurekin y, al mismo tiempo, la abstención de EH Bildu, tal como ya ocurrió hace cuatro años.
EH Bildu, que se ha convertido en una de las principales protagonistas de los comicios celebrados este domingo, ha obtenido nueve escaños en las elecciones de Navarra, dos más que en 2019.
De esta manera, la coalición soberanista consigue situarse como tercera fuerza y desplaza de esa posición a Geroa Bai, que pasa de nueve a siete escaños. Por su parte, Contigo Zurekin, la candidatura respaldada por Podemos e IU, ha logrado tres escaños en el Parlamento navarro.
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Por su parte, el Partido Popular de Navarra, que llevaba como candidato al tránsfuga Carlos García Adanero, ha conseguido tres escaños en Parlamento Foral. Mientras tanto, Vox se estrenará en esta Cámara con dos escaños.
Apoyos cruzados
En este escenario, el apoyo o abstención de EH Bildu será clave para que el PSN consiga retener el Gobierno de Navarra. Al mismo tiempo, la coalición abertzale necesitará la abstención del PSN para recuperar el ayuntamiento de Pamplona, donde el exalcalde soberanista Joseba Asiron ha quedado en segundo lugar, por detrás de UPN.
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Con estos números sobre la mesa, el PSN tiene la llave para que no gobierne la derecha en el ayuntamiento de Pamplona y, al mismo tiempo, EH Bildu tiene en su mano que esas mismas fuerzas conservadoras no regresen al Gobierno foral. Vienen días de negociaciones.