Francisco Pérez de los Cobos no piensa dimitir como presidente del Tribunal Constitucional, pese a los reproches recibidos por haber militado en el PP siendo ya magistrado del alto tribunal o las sospechas de su influencia intelectual en la reforma laboral aprobada por el Gobierno de Rajoy, que está impugnada por el PSOE ante el alto tribunal.

'No tengan duda de que voy a seguir en mi puesto'. Fue el mensaje escueto de Pérez de los Cobos antes de participar en un curso en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, de Santander, en sus primeras declaraciones a la prensa tras desatarse hace un mes y medio la polémica por su pasada militancia en el PP. El actual presidente del TC ocultó ese dato de su biografía en su comparecencia ante el Senado que debía examinar su idoneidad para acceder al alto tribunal.

Este viernes, fue preguntado en concreto por la posibilidad de dejar su cargo ante una eventual incompatibilidad para pronunciarse sobre la constitucionalidad de la reforma laboral, y contestó que no.

No quiso hacer más declaraciones 'por respeto' a sus compañeros y al TC, que debe pronunciarse en breve sobre varias recusaciones que distintos gobiernos autonómicos --Catalunya o Andalucía-- y particulares, como Baltasar Garzón o Arnaldo Otegi, han promovido contra él por su relación con el partido del Gobierno.

Pérez de los Cobos indicó que por esa 'razón muy simple' no debía añadir más comentarios, ya que el alto tribunal debe resolver sobre esas recusaciones en los próximos días. .'Por respeto a mis compañeros y al Tribunal no voy a hacer declaraciones que puedan incidir en su decisión', ha insistido.

El coordinador de Izquierda Unida, Cayo Lara, afirmó este mismo jueves que 'hay pruebas más que suficiente para que se determine la incompatibilidad' de Pérez de los Cobos en la presidencia del TC. Dicha incompatibilidad se basaría en las coincidencias entre el contenido de un artículo firmado por Pérez de los Cobos en 2010 y la reforma laboral que aprobó el Gobierno dos años después. Pérez de los Cobos, quien ha sido cuestionado por ello por sindicatos y partidos de izquierda, ha evitado entrar a valorar este asunto, antes de clausurar el curso 'La democracia constitucional y sus desafíos', con una conferencia sobre 'los problemas que el TC tiene que enfrentar en los próximos meses', ha indicado.