Los Mossos confirman por primera vez el espionaje con Pegasus a dirigentes de ERC al menos durante 2019 y 2020

Los Mossos d'Esquadra han confirmado por primera vez que los teléfonos móviles de dirigentes independentistas fueron espiados con Pegasus. En concreto, han detectado intrusiones con el programa espía a los móviles del diputado en el Parlament Josep Maria Jové, la eurodiputada Diana Riba y el exdiputado Sergi Sabrià, todos de ERC, tal como ha avanzado eldiario.es y ha podido confirmar Público. La policía científica catalana ha entregado el informe pericial al juzgado que investiga el caso.

En concreto, los peritos informáticos de los Mossos han certificado que los teléfonos fueron infectados al menos durante los años 2019 y 2020 mediante varias estrategias, como SMS con enlaces maliciosos o incluso sin tener que clicar nada, y siempre sin que el usuario afectado se diera cuenta.

Jové, Riba y Sabrià son los primeros independentistas afectados por Pegasus que entregan sus aparatos en un cuerpo policial porque lo analice. El resto lo han hecho a través de peritos privados o no lo han hecho puesto que se desprendieron de los aparatos después de ser infectados o no se fían de entregarlos al juzgado.

Espiados al menos durante 2019 y 2020

 Gracias al hecho que los Mossos han tenido acceso directo a los terminales y a las nuevas herramientas de análisis informático, la policía catalana ha podido encontrar más detalles del espionaje del que pudo hacer Citizen Lab en un inicio. En el caso de Jové, por ejemplo, se encontraron indicios de ataques en marzo y en octubre de 2019 y en julio y noviembre de 2020. Jové era uno de los negociadores de ERC con el PSOE para apoyar al gobierno de Pedro Sánchez.

En el caso de Diana Riba, al menos recibió un ataque en octubre de 2019. Una llamada suya a un asesor se interrumpió, y este a continuación recibió una llamada de un número desconocido que reprodujo la grabación de la conversación que justo antes había tenido con la eurodiputada. Esto lo ratificó este asesor la semana pasada en su declaración testifical al juzgado de instrucción.

El informe policial, pero, no ha podido determinar qué información extrajo el software malicioso ni a quien se envió o que se hizo. La jueza de instrucción está pendiente que el Gobierno español desclasifique los documentos del CNI que supuestamente sirvieron para encargar el espionaje.