Segunda jornada del debate del estado de la región en la Asamblea de Madrid y turno de réplica para los grupos. La oposición-Más Madrid, PSOE y Unidas Podemos- no se ha dejado ningún reproche en el tintero y ha cargado contra Ayuso por su gestión privatizadora, a lo que Mónica García (Más Madrid) se ha referido como "modelo en efectivo o con tarjeta" y Carolina Alonso (UP) como "saqueo". Según el socialista Juan Lobato, se trata de un "modelo excluyente"  basado en el "sálvese quien tenga" y centrado en "una élite poderosa y con alto poder adquisitivo".

Para Vox, en cambio, Ayuso no es suficiente. La líder ultraderechista Rocío Monasterio criticó a  la presidenta madrileña por no ser tan severa como ella espera con la izquierda. "Hay que echarlos", repitió en más de una ocasión pero sin decir de dónde, porque al menos el gobierno de la Comunidad de Madrid lleva décadas en manos de la derecha. Aún así, Monasterio dijo de Ayuso que  "amaga pero luego no pega" y que "dice pero luego no hace".

El timo ibérico son ustedes"

Mónica García, que inauguró la sesión, entonó un discurso muy duro contra la presidenta de la Comunidad. Defendió que sus proyectos políticos "son antagónicos" y llegó incluso a decir de la líder del PP que era "un datáfono andante". Levantó los aplausos de su bancada. "Si usted no quiere ser presidenta, yo sí", le espetó. "Quien no quieren que sea son los madrileños", le respondió luego Ayuso.

La líder de la oposición criticó que la presidenta madrileña, en línea con su partido, pusiese en duda la excepción ibérica y aseguró que "lo más normal es pensar que el timo ibérico son ustedes". También dijo del Gobierno de Ayuso que practicaba "la política del abandono" de quienes más lo necesitan "mientras tiene en algodones a los multimillonarios", y criticó que haya consumado "un atraco al bolsillo de los que más lo necesitan" con "sus becas para cayetanos". 

Sus dos intervenciones fueron una cascada de reproches. Mónica García, médico de profesión, señaló que las listas de espera en Madrid han aumentado "un cuarto de millón" y lamentó que las políticas de Díaz Ayuso hayan "desguazado" la sanidad público. En este sentido, anunció una propuesta de ley para limitar los tiempos de las listas de espera y evitar las demoras que actualmente sufre la sanidad pública madrileña.

Por su parte, el portavoz del PSOE, Juan Lobato, llegó al debate con un decálogo de propuestas en educación, sanidad, vivienda, ayudas a autónomos o transporte público. La más llamativa es que planteó abrir los colegios públicos de la Comunidad de Madrid desde las 7h y hasta las 19h, y desde el 1 de septiembre hasta el 31 de julio. Es decir, más horas al día y más días al año, en concreto 11 meses. También planteó que el comedor escolar sea gratuito para todos los alumnos de 3 a 12 años cuyas familias ingresen hasta 35 mil euros al año.

Ayuso responde que todo gratis no funciona

Ayuso le dio la respuesta poco después: gratis no. "Todo gratis no funciona, sería idílico en un mundo ideal. Si se regalan los comedores, el transporte, la educación...Si se regala absolutamente todo las cosas no van a funcionar", contestó la presidenta de la Comunidad de Madrid a los grupos de la oposición. Dice la líder del PP que el discurso de la izquierda es "un disparate".

La confrontación entre Ayuso y la oposición es total en la Comunidad de Madrid. También las dos portavoces de Unidas Podemos, Alejandra Jacinto y Carolina Alonso cargaron contra Ayuso por desplegar un "plan de negocio sobre la educación" al señalar que en la capital hay más alumnos en centros privados que públicos. Madrid es la capital europea de la enseñanza privatizada", dijo Alonso. Ayuso la acusó de mentir poco después y defendió, eso sí, un modelo de absoluta libertad en el que, según ella, se puede elegir donde estudiar. 

Hubo que recordarle a Ayuso la situación de la Cañada Real, donde casi 4.000 vecinos, entre ellos más de mil niños, siguen sin luz. Alonso le reprochó a Ayuso que tuviese "el cuajo de venir ayer a hablar de pobreza energética​" mientras permitía que cerca de 5.000 mil personas vayan a afrontar otro invierno sin luz.

Vox criticó el protagonismo de Ayuso

Y si algo ha dejado claro el debate del estado de la región de Madrid es que la luna de miel que Ayuso vivía con Vox se ha terminado de forma definitiva. La líder de la ultraderecha en la Asamblea madrileña, Rocío Monasterio, cuestionó que Madrid sea la "prioridad" de Ayuso y calificó de "tristes" sus declaraciones sobre el aborto. "Bien podrían estar en boca de Irene Montero", aseguró.

Monasterio, en un discurso racista, xenófobo y negacionista del cambio climático, también criticó los tres días de luto decretados por el fallecimiento de Isabel II. Dijo que era "exagerado" y recomendó a Ayuso que se cuidase de "la tentación de ser la niña en el bautizo, la novia en la boda y el muerto en el entierro".