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Aquarius España acogerá a 15 de los 58 migrantes a bordo del Aquarius que desembarcarán en Malta

La condición del Gobierno maltés para el desembarco es que sean "inmediatamente" distribuidos entre otros Estados miembros de la Unión Europea.

Personas rescatadas por el Aquarius en una imagen de archivo. REUTERS

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España acogerá a quince de los 58 migrantes que se encuentran a bordo del Aquarius, que, previsiblemente atracará en Malta, según han confirmado fuentes de la Moncloa. Las fuentes han señalado que el acogimiento de estos migrantes se produce "en el marco del mecanismo solidario que viene defendiendo España en Europa" desde que el PSOE está al frente del Gobierno.

Este anuncio se ha conocido después de que el Gobierno maltés anunciara, este martes a través de un comunicado, que permitirá desembarcar a los 58 inmigrantes que van a bordo del barco Aquarius a condición de que sean "inmediatamente" distribuidos entre otros cuatro Estados miembros de la Unión Europea (UE).

Las autoridades maltesas han señalado en un comunicado que "las 58 personas a bordo del Aquarius serán desembarcadas en un activo maltés en aguas internacionales: las personas desembarcarán en Malta y todas ellas abandonarán el país para ser inmediatamente redistribuidas en otros cuatro estados miembros de la Unión Europea".

"La operación tendrá lugar tan pronto como sea logísticamente posible", añade la nota, que no ofrece detalles sobre los países que han llegado a un acuerdo, si bien el Ejecutivo de Portugal informó de forma previa que había llegado a un pacto con España y Francia.

El Ejecutivo del socialista António Costa había indicado en un comunicado que recibirá a 10 de los 58 migrantes "por razones humanitarias y frente a la situación de emergencia en que se encuentran estas personas" y reiteró su deseo de alcanzar una "solución europea integrada, estable y permanente" en cuestiones migratorias.

Las ONG SOS Méditerranée y Médicos Sin Fronteras (MSF), responsables del barco de salvamento Aquarius, pidieron este lunes a las autoridades francesas que, de forma excepcional y por razones humanitarias, permitieran que esa embarcación atracase en Marsella, pero el Ejecutivo galo lo había denegado.

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