'Ha sido un trabajo muy difícil, pero las verdaderas dificultades empiezan ahora'. Recordando los últimos diez meses de trabajo, y reconociendo que lo más difícil está por llegar: así es como Pablo Iglesias ha comenzado su primer discurso como secretario general de Podemos, en una jornada en la que ha barrido todas las posibles dudas sobre su liderazgo, al hacerse con más de 95.000 de los 107.000 votos de las bases de Podemos.

Después de señalar a su predecesor en el atril, Alexis Tsipras, como futuro presidente griego, Iglesias ha pronunciado un discurso en el que ha hecho mención a gran cantidad de las ideas que horas antes explicó a Público, y en el que ha señalado que no sólo el miedo, 'sino también la sonrisa, están cambiando de bandos'. 'No tenemos miedo, el miedo lo están empezando a tener otros, como JP Morgan', ha esgrimido Iglesias.

La necesidad de recuperar la soberanía popular, el rechazo a las políticas de austeridad o la labor de Podemos como 'escoba de la corrupción' han sido algunos de los ejes del discurso de Iglesias, en el que también ha llamado 'ladrón' al presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker.  En esta línea, Iglesias ha avisado de que 'la casta' seguirá adelante con su 'campaña del miedo' contra Podemos. Aunque, como él mismo ha recordado, en vista de los resultados de las encuestas, su estrategia no está dando ningún resultado. 

'Podemos no es un experimento político, no tiene nada que ver con que yo hable bien en la televisión. Podemos es el resultado del fracaso del régimen''Podemos no es un experimento político, no tiene nada que ver con que yo hable bien en la televisión. Podemos es el resultado del fracaso del régimen, de sus oligarcas y de sus partidos. Es una respuesta a todos esos viejos, de corazón viejo, que decían que no se podía. Pues, ¡claro que Podemos!', ha clamado Iglesias ante las miles de personas concentradas en el Teatro Apolo de Madrid para asistir a la presentación de resultados y cierre de la Asamblea Ciudadana de Podemos.

Además de tomar prestada una frase del secretario general de Sortu, Arnaldo Otegui -'sonreíd porque vamos a ganar'-,  Iglesias ha aprovechado su intervención para leer un poema de Miguel Hernández, momentos antes de invitar a cantar con él a sus compañeros, recién designados para integrar la directiva de Podemos. 'Parece que les molesta que cantemos, pues cantaremos', ha dicho Iglesias.

Con la interpretación del Cambia, todo cambia de Mercedes Sosa, y L' Estaca, de Lluís Llach -que también sonó en Vistalegre-, Podemos ha dado por terminado su periodo constituyente, y ha comenzado a escribir una nueva página de su todavía corta historia.

Ada Colau, José Antonio Pérez Tapias, Joan Herrera, Diego Cañamero y otros tantos representantes políticos han apoyado con su presencia al líder de Podemos, que se ha rodeado también de representantes diplomáticos y sindicales europeos y latinoamericanos (Colombia, Ecuador, Argentina o Venezuela). 'Lo que hemos aprendido de América Latina es que hay que ser enemigos de la impotencia', ha dicho Iglesias.

Entre los asistentes también había representantes del pueblo palestino y kurdo, de diferentes movimientos sociales como la marea blanca o la unión de actores, pero también de organizaciones como Cáritas. Una lista interminable de nombres de organizaciones y personas, invitadas por Iglesias para ser testigos de la primera jornada del eurodiputado como secretario general de Podemos.