ERC vuelve a registrar en el Congreso la ley de alquileres de temporada y eleva la presión sobre Junts

Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) ha registrado este martes una reforma legislativa para regular los alquileres de temporada. Es la misma que promovió Sumar en septiembre ―ambas emanan de una iniciativa de los Sindicatos de Inquilinas― y que terminó tumbando Junts per Catalunya en el último momento. Fuentes de ERC explican a Público que se han trabajado algunos cambios junto con los Sindicatos de Inquilinas en materia, sobre todo, competencial.

Precisamente la eventual invasión competencial en la que incurría, según Junts, la ley que registró Sumar fue uno de los factores que llevaron a los de Nogueras a oponerse a su admisión a trámite. La actual reforma recoge que las administraciones competentes en materia de vivienda ―en el caso catalán, la Generalitat― "podrán controlar las causas de temporalidad de los arrendamientos temporales", tal y como puntualizan fuentes republicanas.

Es un movimiento que estrecha el margen de los de Carles Puigdemont. Se trata de un tema muy sensible en Catalunya y desde ERC esperan que apuntalando la cuestión competencial los posconvergentes se avengan a permitir la admisión a trámite de la iniciativa para que pueda debatirse en la Cámara Baja. 

ERC liderará la defensa de la ley, pero la registrará junto al resto de fuerzas de izquierdas de la Cámara, como ya ocurriera con la que promovió Sumar. Así, Sumar, EH Bildu, Podemos y Bloque Nacionalista Galego también han estampado su firma en la iniciativa, que entra ahora en una nueva fase. A la espera de que se ordene cuándo va a pleno para que los diputados y diputadas voten su toma en consideración, ERC deberá trabajar para que Junts no vuelva a tumbarla y evitar un nuevo chasco que podría bloquear la cuestión.

La proposición de ley que decayó en septiembre incluía limitar a seis meses la duración máxima de los alquileres temporales, de manera que todo aquel arrendamiento que excediera ese medio año pasara a regirse por las normas de una vivienda de alquiler habitual y los propietarios tuvieran las obligaciones y deberes correspondientes. Y no solo eso. También en el caso de que un alquiler se renovara, aunque no alcanzara los seis meses, pasaría a considerarse vivienda habitual.

En este caso, ERC incluye un cambio en su iniciativa. Mantiene intacto el fondo de la ley, pero modifican la duración máxima de los arrendamientos temporales pasando de los seis a los nueve meses, de forma que "se puedan incluir en esta figura jurídica arrendamientos de alumnos y personal docente que siga el curso académico". 

A efectos prácticos, la ley funciona como una especie de enmienda a la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), que deja una "rendija" ―en palabras utilizó, en su día, Íñigo Errejón― en la figura de los alquileres de temporada por la que algunos inquilinos están sufriendo, tal y como explican los Sindicatos de Inquilinas, tratos abusivos.