Durante algo más de media hora, Pedro Sánchez protagonizó una entrevista en TVE, en la que claramente quiso cultivar la imagen de líder moderado, lanzando mensajes a favor del diálogo con Catalunya dentro de la Constitución, apostando por acabar con la crispación política y anunciando que si tiene una mayoría suficiente buscará acuerdos con todos, "porque no me cierro a entenderme con los independentistas, pero también con Ciudadanos, Podemos o el PP", dijo.

Sánchez primero explicó el adelanto electoral, que justificó por no tener Presupuestos ya que, en su opinión, "los Presupuestos son todo para un Gobierno porque son el proyecto que representa un Gobierno", dijo.

El presidente lamentó la falta de apoyo de los independentistas, pero recordó que no había ningún acuerdo ni pacto con ellos como se ha dicho. "Nunca hubo un acuerdo con los independentistas, ni ninguna condición", dijo el presidente; y recordó que a lo largo de estos ocho meses de Gobierno ha habido acuerdos con todos los grupos de la Cámara Baja.

No obstante, mantuvo que su disposición sigue siendo el diálogo con Catalunya dentro de la Constitución, y rechazó el documento que le presentó Quim Torra para negociar por considerarlo "inasumible". En este sentido, Sánchez apuntó que tras estos meses ha llegado a la conclusión de que "el independentismo tiene pavor a sentarse a dialogar, a sentarse en una mesa, a ser conscientes de que la independencia no es posible en Catalunya", afirmó.

Pedro Sánchez puso en valor los acuerdos alcanzados en estos meses de Gobierno con todas las fuerzas políticas y recordó que se han aprobado 13 leyes y 25 decretos ley, dando a entender que esta será su actitud tras las elecciones porque no se "negará a hablar" con nadie, aseguró.

Así, al ser preguntado si pactará con los independentistas, indicó que buscará acuerdos con todas las fuerzas políticas sin exclusiones, pero no quiso anticipar pactos. "Lo importante no es decir con quién se va pactar, sino demostrar a los españoles que se cuenta con un proyecto".

En el tono "buenista" que exhibió durante toda la entrevista, Sánchez abogó porque el 28-A acabe con la crispación política que ha vivido la sociedad española los últimos tiempos y, en su opinión, las elecciones,"debería servir para unir a los españoles" y para que los partidos sean capaces de hablar entre ellos.

"Borrell, excelente candidato"

Sánchez confirmó que habrá una amplia renovación entre los parlamentarios buscando gente leal a su proyecto, y volvió a apuntar a Josep Borrell como cabeza de lista del PSOE a las europeas. "Es un extraordinario ministro y un excelente candidato. Es claro que es un candidato natural al puesto", dijo, aunque no confirmó que la decisión esté ya cerrada.

El candidato socialista se despidió mostrando plena confianza en sus fuerzas, negando cualquier posibilidad de irse si no ganase las elecciones, y asegurando que espera que los ciudadanos confíen en que pueda seguir desarrollando su proyecto después de la tarea hecha.

El equipo de Sánchez quedó más que satisfecho con la entrevista y no olvidaron explicar que se realizó junto a una mesa antigua de marquetería que perteneció a Isabel II y delante de un cuadro de José García Guerrero:"Serie sur con Rojo (1981-1982)".  Por informar.