La cofundadora de Vox Cristina Seguí ha recibido este jueves una condena de 15 meses de prisión por difundir un vídeo de unas menores supervivientes de una violación grupal en València. El caso que trascendió a los medios como "la manada de Burjassot". La jueza identifica en la sentencia que la agitadora trató de menospreciar y denigrar a las jóvenes públicamente.

En concreto, la condena responde a dos delitos. Por un lado, uno contra la integridad moral, por el que se le impone un año y tres meses de cárcel. Por otro lado, la sentencia la declara culpable de revelación de secretos con agravante de género, con la obligación de pagar una multa de diez euros diarios durante tres meses. Además, también deberá compensar a una de las menores con 12.000 euros.

La ultraderechista compartió un vídeo por Twitter en el que aparecen las dos niñas, de 12 y 13 años, y otra niña amiga de ambas, también menor, en un directo de Instagram que fue grabado y difundido por el entorno de los violadores.

Seguí, que en ese momento contaba con 200.000 seguidores en su cuenta, acompañó el vídeo con el siguiente texto: "Está todo mal, no es una niña de 12 sino de 15 o 16, el sexo fue acordado y consentido y lo hicieron para hacerse famosas en televisión gracias a medios de difusión como vosotros".

Esta información era completamente falsa, ya que las menores sí tenían 12 y 13 años en el momento de la agresión y la investigación pertinente probó los hechos, condenando a cuatro de los cinco violadores. Uno de los agresores era inimputable porque tenía 14 años.

Además, ese mismo día acudió al canal de YouTube del pseudoperiodista y también agitador Javier Negre, en su programa Estado de alarma. El vídeo se titulaba Desmontando la falsa manada de Burjassot, con Cristina Seguí, pero fue eliminado por exigencia de la Agencia Estatal de Protección de Datos.

La exdirigente de Vox llegó a afirmar en ese vídeo que "las menores estaban fabricando una prueba falsa y que merecían que sus padres les pegasen una hostia".

La madre de una de las víctimas declaró en el juicio que tuvo lugar el pasado 19 de junio, desde la difusión del mismo, su hija había tratado de suicidarse, había tenido que cambiar dos veces de instituto e incluso de localidad de residencia, y que recibe tratamiento psicológico. "Habían identificado a mi hija. Sufrió bullying en los dos institutos", afirmó.

Según el testimonio de la madre, la menor dejó de asistir a clase y los especialistas que llevan su tratamiento le indicaron que presenta patrones del trastorno límite de personalidad debido a los hechos. "A raíz de esto su vida ha cambiado totalmente", apostilló.

La sentencia contra Cristina Seguí por humillar a las niñas violadas no es firme, por lo que la ultraderechista podría recurrirla.