La Comisión de Venecia, dependiente del Consejo de Europa, ha dado el visto bueno a la ley de amnistía en un borrador en el que reconoce que no tiene por qué afectar a la separación de poderes, puesto que deja en manos de los jueces la interpretación final del texto. El órgano avala su existencia y reconoce otras normas similares en diferentes países europeos, pero critica que su tramitación se haya producido por la vía de urgencia, impidiendo un debate más amplio en la sociedad española.

El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha valorado positivamente la decisión y recuerda que "la amnistía es una herramienta para la reconciliación". El texto, pactado con Junts per Catalunya y ERC, cumple además con los "estándares internacionales", según ha detallado el socialista en unas declaraciones recogidas por Europa Press.

La Comisión de Venecia estudió el texto de la ley de amnistía después de una petición que realizó el Senado, donde el PP tiene mayoría absoluta. Una delegación del organismo europeo visitó España entre los días 8 y 9 de febrero para reunirse con los distintos grupos parlamentarios del Congreso y el Senado, así como con miembros del Gobierno, expertos constitucionales y asociaciones judiciales, entre otros, para recabar información sobre la iniciativa.

El órgano consultivo ha fijado una serie de criterios para asegurar la legalidad de la amnistía y asegura que la propuesta del PSOE y los partidos independentistas cumple casi todos ellos. La Comisión de Venecia ha tenido en cuenta factores como el respeto al derecho internacional y la seguridad jurídica al definir claramente los actos amnistiados, así como una tramitación abierta al debate y la participación. El borrador, no obstante, propone algunas mejoras, como precisar el ámbito temporal y material y "dialogar sin prisas" antes de aprobarla. 

"El PP quiso utilizar la Comisión de Venecia contra el Gobierno de España y ha salido escaldado", apuntan desde Moncloa. El órgano consultivo ha llamado a la participación de todos los actores políticos, incluida la oposición, en la tramitación de la amnistía. "Esperamos que el PP use este informe y sus recientes confesiones sobre los indultos para abandonar su estrategia de tensión y sumarse a la agenda del reencuentro", señalan fuentes del Ejecutivo. 

"La Constitución no regula las amnistías"

Los populares, en cambio, consideran que el borrador de la Comisión de Venecia no respalda el texto de la amnistía y vuelven a remitirse a la Constitución. "El informe dice que es necesaria una reforma constitucional y que deben tomarse su tiempo para redactarla", justifican fuentes del Senado. El PP sostiene que el texto "adolece de indeterminación en cuanto a su objeto y ámbito temporal", por lo que sería contrario a los principios de seguridad jurídica y legalidad penal. "La Constitución no regula las amnistías, por lo que debería reformarse", matizan desde la Cámara Alta. 

Horas después, fuentes de Moncloa replicaron la versión de los populares y por considerarla errónea. "Las mentiras del PP sobre el informe de la Comisión de Venecia tienen las patas muy cortas. El borrador dice que la reforma constitucional es preferible, no obligatoria", argumentan desde el Ejecutivo. Asimismo, recuerdan que otros países como Alemania, Bélgica, Brasil, Canadá o Irlanda han reconocido la admisibilidad de la amnistía en su legislación. 

Génova también había puesto el foco en la "indeterminación en el objeto y ámbito temporal" de la norma, pero Moncloa reconoce que los límites están definidos. "Los actos amnistiados requieren una conexión o bien con las consultas de 2014 y 2017 o con el proceso independentista", precisan las mismas fuentes. El PSOE también presume de haber rechazado la propuesta de amnistía de los secesionistas por considerar que pretendía "cubrir a individuos específicos", algo que la Comisión de Venecia tacha de inoportuno.