Ciudadanos deja caer una ley en Andalucía que apoyaba hasta hace dos días para complacer al PSOE

@CdelCastilloM

MADRID.- El acuerdo de legislatura entre PSOE y Ciudadanos ha empezado a dejar los primeros damnificados el mismo día de su ratificación. El giro de los de Albert Rivera, que juró y perjuró que no pactaría con Pedro Sánchez, ha provocado que dejen caer una ley en Andalucía que apoyaban públicamente hace dos días.

Aprobada moción en apoyo a la toma en consideración de Proposición de Ley de Atención Temprana.Presentada por @CsRinconVict @ElenaCsRincon

— C's Rincón Victoria (@CsRinconVict) 23 de febrero de 2016

"Hasta anoche [por el martes] teníamos el compromiso de todos los grupos", se lamenta en una conversación con este medio Antonio Guerrero, portavoz de la Plataforma. "No sé lo que le ha prometido el PSOE a Ciudadanos, pero ha dejado vendidos a 20.000 niños que están siendo atendidos y a otros 10.000 que, aún teniendo problemas, no están siendo atendidos", acusa. 

"No sé lo que le ha prometido el PSOE a C's, pero han dejado vendidos a 20.000 niños que están siendo atendidos y a otros 10.000 que deberían estarlo", denuncia la plataforma

Ciudadanos ha vendido un acuerdo con el PSOE en el que se aumenta el presupuesto para atender a estos niños durante el debate sobre la toma en consideración de la propuesta de ley, que finalmente ha sido rechazada por 55 votos en contra por 52 a favor. Sin embargo, Guerrero denuncia que "lo que se estaba buscando era una solución digna a largo plazo, no mendigando más dinero".

Un decreto "insuficiente"

Guerrero explica que con el decreto que promueve Susana Díaz, la Junta pretende tener el control sobre el diagnóstico de estos trastornos. En la proposición de ley redactada por la plataforma, los pediatras podían derivar directamente al niño a los centros de atención especializada para que fuera diagnosticado y atendido. Con la propuesta de Díaz que ha apoyado Ciudadanos a última hora, el proceso se ralentiza. 

"El pediatra se lo tiene que comunicar a un ente nuevo que quieren crear, que en un plazo de 30 días citará al niño y en una sesión le dirán qué trastorno tiene, qué intensidad, cuál es el clima familiar que le favorece, cuál debe ser su entorno educativo... Eso es imposible", explica Guerrero, ya que muchos de los síntomas de los menores se agravan "si se les saca de su ambiente o se bloquean". 

"Habrán ganado la votación, pero han tenido la mayor derrota política que podrían tener", sentencia Guerrero, abuelo de un menor que recibe atención temprana.