Aunque la legislatura catalana encara su recta final (de hecho, lo hace desde hace meses), Quim Torra ha decidido llevar a cabo una remodelación del Gobierno autonómico.

Los cambios, confirmados poco antes de mediodía pero avanzados previamente por La Vanguardia y ratificados por Público de fuentes del Palau de la Generalitat, suponen el relevo de los consejeros Miquel Buch (Interior), Mariàngela Villalonga (Cultura) y Ángeles Chacón (Empresa), en quien Torra habría perdido la confianza. Los sustitutos serán el abogado Miquel Samper (Interior), Àngels Ponsa (Cultura), hasta ahora directora general de Creación, Acción Territorial y Bibliotecas, y el economista y ex eurodiputadoRamon Tremosa (Empresa).

La crisis de Gobierno llega justo después de la ruptura entre el PDeCAT y Junts per Cat. De hecho, Chacón era la única representante del PDeCAT que se mantenía en la primera línea del Ejecutivo catalán y es la persona que suena como hipotética candidata de la formación presidida por David Bonvehí a las futuras elecciones al Parlament.

Según apunta la ACN, citando fuentes de Palau, los cambios de Torra se deben a la voluntad del presidente de fortalecer el Ejecutivo, de cara a la posible inhabilitación (asumida por Torra) por parte del Tribunal Supremo.

Además, el jefe del Govern habría perdido la confianza en Buch (a quien ya estuvo a punto de destituir en 2019 por los disturbios posteriores a la sentencia del 1-O), Villalonga y Chacón.

Fuentes cercanas al ya ex consejero de Interior, sin embargo, aseguran a Público que Buch habría pedido dejar el cargo. Tanto Buch como Chacón han formado parte del Ejecutico de Torra desde el primer momento (mayo de 2018), mientras que Villalonga se incorporó en marzo del año pasado, en sustitución de la ahora diputada en el Congreso Laura Borràs.

Otra interpretación de la remodelación del Gobierno,si finalmente se confirma, es queTorra pretende alejar el adelanto electoral , que le reclama la oposición y también, aunque con una intensidad diferente, ERC. Ahora bien, si el próximo 17 de septiembre el Tribunal Supremo confirma la inhabilitación del presidente dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña por el caso de los lazos amarillos, entonces se activará la cuenta atrás de unos comicios que, como tarde, se celebrarían al cabo de cuatro meses.

Los perfiles de los nuevos consejeros

Los tres nuevos consejeros acumulan una larga trayectoria política. El más conocido es Ramon Tremosa. Economista y profesor de la UB, se hizo conocido por estudios sobre las balanzas fiscales y las infraestructuras y en 2009 dio el salto a la política como eurodiputado de CiU, cargo que ocuparía durante una década. Ahora, por primera vez, ocupará un cargo institucional en Cataluña.

Àngels Ponsa, de 60 años, tiene una larga trayectoria dentro de la antigua CDC. Del 1995 al 2003 fue teniente de alcaldía en Sant Cugat del Vallès, la ciudad donde reside desde hace décadas. Posteriormente, fue diputada en el Parlamento entre 2011 y 2015 y, posteriormente, durante el 2017, primero en las filas de CiU y después a las de Juntos por Sí. Ya en la actual legislatura, en junio de 2018 fue nombrada directora general de Cooperación Cultural, cargo que ocupó hasta julio de 2019, cuando se convirtió en directora general de Creación, Acción Territorial y Bibliotecas.

Miquel Samper, de 54 años, es un abogado de larga trayectoria que ha sido decano  del Colegio de Abogados de Terrassa, presidente del Consejo de la Abogacía Catalana y adjunto a la presidencia del Consejo General de la Abogacía Española. En 2015 encabezó la lista de CiU en las elecciones municipales de la co-capital vallesana y en 2019 fue el número dos de la lista de JXC en la ciudad. Por lo tanto, hace cinco años que es concejal.