Botella hace campaña para 2015 y promete eliminar la tasa de basuras
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Después del "pulso" (como ella misma lo denominó) mantenido con los trabajadores de limpieza del Ayuntamiento durante los días de huelga, Ana Botella promete ahora que eliminará la tasa de basuras el próximo año. Mientras su marido, José María Aznar, lamentaba hoy que el partido le haya apartado de la precampaña para las elecciones europeas, la alcaldesa comenzaba hoy así a hacer campaña de cara a las municipales de 2015 sin que en el partido hayan confirmado siquiera si ella será la candidata elegida.
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Ella elude responder también sobre sus aspiraciones ("Lo que tengo claro y me importa es el futuro de Madrid, independientemente de quien lo encabece", sentenció hoy) , pero lo cierto es que ya ha empezado a vender sus logros, incluso frente a sus rivales de las quinielas. En el foro ABC Deloitte celebrado hoy en el Casino de la capital, Botella presumió frente a la presidenta del PP madrileño, Esperanza Aguirre, y la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes —ambas posibles aspirantes a la Alcaldía— de haber conseguido ahorrar "gracias al esfuerzo de los ciudadanos", a quienes prometió comenzar a aliviar también con la eliminación de los parquímetros de Carbanchel, Fuencarral y Hortaleza.
Con ello, Botella eliminará algunas de las medidas impuestas en el pasado por el ahora ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, presente en el acto y a quien la alcaldesa envió halagos como el de llamarle el "alcalde arquitecto". Así, aunque asumió una pérdida de 1.650 millones de euros de ingresos acumulados durante "la histórica desaceleración económica" vivida desde el inicio de la crisis, Botella culpó de todos los males del Ayuntamiento no a su antecesor, sino al Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero.
En su intervención, titulada Lo que nos queda por hacer, la alcaldesa presumió de haber llevado a cabo un trabajo "ingrato, pero vital" protegiendo las finanzas municipales, reduciendo el déficit y trabajando con "eficiencia presupuestaria". Asegurando que, a día de hoy, ha logrado reducir el gasto corriente anual en 500 millones de euros, agradeció "el esfuerzo de los madrileños" y abogó por aprovechar su mandato "para dar prioridad absoluta a la mejora de la vida cotidiana de los madrileños".
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De ahí la promesa de invertir más —hasta 375 millones, frente a los 330 previstos para 2014— gracias al "remanente de tesorería" obtenido, bajar algunos impuestos hasta llegar a eliminarlos en 2015 (como la tasa de basuras, que bajará un 12% este año) y "mejorando la calidad de vida" de los ciudadanos con medidas como eliminación de las zonas de estacionamiento regulado en los "cascos históricos periféricos".
Todas ellas, medidas que demostrarían su "compromiso con el futuro de Madrid y de los madrileños" en las futuras elecciones municipales, aunque negó que se tratara de medidas electoralistas. "Llegará el momento de tomar la decisión sobre quién llevará a cabo este proyecto en nombre de mi familia política [el PP]. Estoy segura de que vamos a hablar juntos de eso, como debe hacerse. Pero aún respeto más a los ciudadanos y soy consciente de que estos debates, a día de hoy, no son los suyos", explicó.
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No obstante, son muchos los que piensan que, especialmente después del tropezón de Aguirre con su multa, Botella ya se ve como candidata a la Alcaldía. Y ha preferido rebajar el tono de las últimas trifulcas mantenidas en el PP madrileño . Así, preguntada sobre su relación con Aguirre y Cifuentes, la alcaldesa aseguró que son "amigas y compañeras" y evitó calificarlas como "rivales". Sobre su rifirrafe con la delegada del Gobierno por su propuesta de limitar las manifestaciones en el centro de Madrid, Botella aseguró que ya se habían dicho "todo en su momento" y que ahora, simplemente, están centradas en "mantener la colaboración entre el Ministerio de Interior, la Delegación de Gobierno y el Ayuntamiento para que la vida de los madrileños se vea lo menos afectada posible por las manifestaciones".
Por último, dijo no estar preocupada por que el juicio por el caso Madrid Arena se vaya a celebrar en plena campaña electoral porque "lo que importa es el sufrimiento de las familias que perdieron a sus hijas". También intentó eludir su disputa con el presidente de la Comunidad, Ignacio González —también presente en el foro ABC—, pero terminó reconociendo que ganar la Alcaldía es importante para ganar también el Gobierno regional, aunque insistiendo también en que "no es condición suficiente" para que eso ocurra.