Aina Vidal: "En estas elecciones mucha gente nos jugamos la vida"
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el prat de llobregat,
Forjada en la antigua ICV -arrancó la militancia política en Joves d'Esquerra Verda, sus juventudes- y bregada en el Congreso tras acumular siete años y medio como diputada, Aina Vidal (Barcelona, 1985) vive su primera campaña como cabeza de cartel, como número uno de la lista por Barcelona de Sumar – En Comú Podem.
Consciente de que existe una "ola reaccionaria", considera que las elecciones generales del día 23 son las más importantes en décadas y que está en juego, directamente, un "cambio de época". Para evitarlo, reclama una movilización masiva de los votantes progresistas que permita reeditar el Gobierno de coalición con el PSOE.
Reconoce que las "grandes cifras macroeconómicas" del Ejecutivo de Pedro Sánchez a menudo no han llegado "al bolsillo de la gente" y apuesta por unas políticas "más ambiciosas" que permitan "mejorar la vida" de la ciudadanía, como la paulatina reducción de la jornada laboral hasta las 32 horas.
En este sentido, defiende que en la última legislatura "cuando se ha impuesto el alma de Yolanda Díaz y no Nadia Calviño es cuando hemos avanzado". Atiende a Público después de participar en un acto de campaña en El Prat de Llobregat (Barcelona), feudo histórico de los Comuns -previamente de ICV y del PSUC-.
Ya hemos superado el ecuador de la campaña de unas elecciones generales en las que, con la excepción del CIS, casi todas las encuestas sitúan a un futuro gobierno entre PP y Vox como la opción más probable. ¿Qué sensaciones tiene?
Desde que nos hemos presentado, en Sumar vamos en una línea ascendente y si existe alguna posibilidad de ganar este gobierno de coalición pasa por nosotros, sin duda. Creo que el Partido Socialista ha llegado a su tope y ahora mismo aquellas que nos estamos batiendo en muchas provincias, como Girona, Lleida y Tarragona, somos nosotros con Vox y, por tanto, somos la garantía para dar este impulso y conseguir un gobierno de progreso.
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Si tuviera que resumir las principales cuestiones, ¿qué cree que está básicamente en juego el 23J?
Mucha gente nos jugamos la vida, directamente. Nos jugamos que nos acosen por la calle, que nos insulten, que nos agredan, nos jugamos una impunidad absoluta de la violencia hacia colectivos que desgraciadamente llevan muchos años sufriendo el racismo, la homofobia... Pero también nos jugamos nuestras lenguas, las comunidades autónomas o el autogobierno.
Nos lo jugamos todo en estas elecciones, por eso no salimos a la contra, sino a favor, creo que es lo que nos pide la gente y lo que debemos impulsar en esta campaña. Estas elecciones van de vida y de luz y esto es lo que queremos representar.
Una de las grandes dudas del domingo es la afluencia a las urnas. En las municipales justamente muchos electores de izquierdas se abstuvieron. ¿La campaña está sirviendo para reactivarlos?
Las campañas son útiles y ésta lo será especialmente. Estoy convencida de que hay gente que a día de hoy no ha decidido si irá a votar o no, y entiendo que tengan dudas por la situación y, por supuesto, por el calor, pero creo que deben ir a votar ni que sea con un ventilador encima. No podemos permitirnos el lujo de no ir votar en estas elecciones, no puede haber ni un solo voto progresista que se quede en casa.
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¿Estamos en un horizonte globalmente más reactivo que propositivo, dominado por los partidos de derechas, y esto hace que las formaciones que defienden avances en derechos lo tengan más complicado?
Debemos ser conscientes de que existe una reacción ante las políticas que hemos aprobado, esto es evidente. Hay quienes que creen que las mujeres no deben poder abortar, quienes que creen que las personas homosexuales deben pasar por terapias de reconversión, que creen que el catalán, el aragonés, el gallego o el vasco son prácticamente idiomas bárbaros que deberían eliminarse, hay personas que creen que los toros son cultura y los hay que creen que pueden destruir nuestro país para poder embolsarse unos cuantos sobres.
"Hay una ola reaccionaria y la respuesta debe ser ir a votar, debemos ganarlos en las urnas"
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Hay personas así y estos cuatro años supongo que lo han pasado mal, porque hemos impulsado nuevos impuestos a la banca y a las grandes fortunas, hemos impulsado un gran escudo social que hemos tenido que sufragar entre todas y los que están en una posición más privilegiada han tenido que pagar más y claramente estas personas están en una reacción contra el feminismo, la diversidad territorial, la ley del aborto, la ley trans... Sí, hay una ola reaccionaria, es una evidencia, y a mí me da miedo, pero precisamente creo que la respuesta debe ser ir a votar, debemos ganarlos en las urnas. Nos jugamos no un cambio de ciclo político, sino un cambio de época, que es mucho más grave.
¿Las tensiones en la configuración de Sumar, con la exclusión de personas como la ministra de Igualdad, Irene Montero, pueden dificultar esta movilización de votantes de izquierda por el mensaje de división que envían?
El momento de hacer listas siempre es difícil en todos los partidos, y si miramos a todas las candidaturas, tanto a la izquierda como a la derecha, ha habido cismas importantes en algunas. Lo que nosotros hemos hecho es histórico, al menos en democracia nunca había pasado, y es que toda la izquierda plurinacional nos damos la mano y avanzamos juntas y ésta es la única manera que hay para ganar a Vox y al PP. Y esto es lo que hemos hecho.
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Ahora bien, entiendo que desde fuera se ve como algo fácil y se reclama que la izquierda vaya siempre junta, pero detrás, en las bambalinas, todo es muy complicado, porque son 15 partidos diferentes, con aspiraciones legítimas, con personas que tienen también sus aspiraciones y es difícil hacer ese encaje de bolillos. Pero creo que lo hemos hecho bien, vamos todas juntas, con las compañeras de Podemos, de Més, de la CHA, de Compromís, de todas partes... E insisto: creo que el PSOE ya ha llegado a su techo y ahora el único que puede ganar a Vox y al PP son Sumar y Yolanda Díaz.
Unidas Podemos logró 35 diputados en las elecciones de noviembre de 2019, siete de los cuales En Comú Podem en Catalunya. ¿Con qué resultado se sentiría satisfecha?
El resultado con el que me sentiría satisfecha y feliz sería la revalidación del gobierno de coalición, con ningún otro podría alegrarme.
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Entiendo que para que esto sea posible Sumar debe superar estos 35 diputados y, por tanto, En Comú Podem también debe crecer.
Insisto, para mí estas elecciones son una cuestión de coaliciones, bien el PP con Vox o Sumar con el PSOE, esa suma debe ser una mayor que la otra. Lo que decimos es que todo aquel que ame a Catalunya, que ame a su pueblo y que sea progresista no se puede quedar casa. Y esto va también de cómo funciona el sistema electoral de este país y significa que los únicos que podemos ganar escaños a la ultraderecha somos Sumar. Esperamos tener unos resultados que nos permitan revalidar el gobierno de coalición, que para mí es el único resultado positivo posible en estas elecciones.
¿Descarta una hipotética abstención del PSOE para que pueda gobernar el PP sin tener que pactar con Vox?
No sé qué va a hacer el PSOE, lo que sí sé es que si Sumar tiene el apoyo suficiente nuestro voto sin duda irá para un gobierno de progreso y para un presidente de izquierdas.
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¿Como se explica que una parte importante de las clases populares se decanten por partidos de derechas en un contexto de crecientes necesidades materiales frente a un gobierno que ha subido significativamente el salario mínimo, ha creado empleo y ha evitado la pérdida de poder adquisitivo de las pensiones?
Creo que antes de criminalizar a las clases populares debemos mirar exactamente de dónde salen los votos de la derecha y de la extrema derecha y mayoritariamente salen de la clase alta, que no tiene ninguna duda de que ellos son los que defenderán sus privilegios.
Es cierto que ha habido penetración en las clases populares y eso tiene que ver, entre otras cosas, con que han faltado propuestas que sean más valientes y lleguen realmente al bolsillo de la gente. Hemos hecho unas grandes cifras en términos macroeconómicas, pero ha costado que llegaran al bolsillo de la gente.
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"Hemos hecho unas grandes cifras en términos macroeconómicas, pero ha costado que llegaran al bolsillo de la gente"
Por eso apostamos por medidas como la cesta básica de la compra. Y esto significa también aplicar la Ley de vivienda y que sea más ambiciosa, mejorar los salarios que tenemos en nuestro país, que bajen los precios de los alimentos... En este Gobierno ha habido dos almas y cuando ha ganado el alma Calviño algunas de estas propuestas han salido adelante y han sido un fracaso, y cuando ha ganado el alma de Yolanda Díaz sin duda hemos avanzado, se ha subido el salario mínimo, se ha aprobado la reforma laboral y han salido adelante leyes pioneras en Europa, como la ley rider.
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¿Para aprobar medidas realmente ambiciosas siempre hay mucha resistencia por parte del PSOE?
Nos cuesta mucho. Por ejemplo, recuerdo cuando se aprobaron los ERTE: Nadia Calviño decía que no podía ser, que era inasumible, pero por suerte ganó el alma de Yolanda Díaz. Estuvimos nueve meses para aprobar el incremento del salario mínimo, en un momento en el que las familias lo estaban pasando muy mal, pero por suerte volvió a ganar el alma de Yolanda Díaz.
Nos costó muchísimo la reforma laboral, fue un sufrimiento... Y hemos visto reformas del PP y del PSOE que iban en direcciones muy distintas. Y precisamente creo que si algo hemos demostrado es que cuando avanzamos y hacemos políticas realmente ambiciosas es cuando nosotros estamos en el gobierno y el alma de Yolanda Díaz gana.
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Si se repitiera el gobierno de coalición, ¿cuáles deberían ser las medidas prioritarias a corto plazo?
En términos inmediatos, la economía, aplicar el acuerdo para tener una cesta de la compra a precios asequibles y, segundo, hipotecas. Ahora mismo, debido a la política absolutamente errática del Banco Central Europeo de subir tipos de interés se está produciendo un encarecimiento de las hipotecas de la gente en 200, 300 o 400 euros, que es una auténtica barbaridad.
Y eso significa ser ambiciosas y [aprobar] ese bono de 1.000 euros en las hipotecas a quienes les han incrementado las hipotecas, pero también significa pensar en alternativas para bajar los precios de los alquileres. Por ejemplo, hemos propuesto que el ICO se convierta en una banca pública y que podamos conceder hipotecas a unos tipos y condiciones mucho más beneficiosas para la gente.
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"Debemos tener más tiempo para vivir mejor"
Pero para mí existen dos grandes retos en esta legislatura, que son el tiempo y el cambio climático. Cuando hablamos del tiempo hablamos de mejorar la calidad de nuestra vida. Por eso apostamos por reducir de forma gradual la jornada laboral hasta las 32 horas, que significa ganar una hora al día y tener más tiempo para estar con nuestros amigos, para descansar. Debemos tener más tiempo para vivir mejor. Y esto también tiene que ver con la salud mental.
Y sobre el cambio climático, queremos hablar de nuevos derechos climáticos, que están reconocidos por Naciones Unidas y debemos importarlos en nuestro país porque aquí no existen y eso significa, por ejemplo, que los trabajadores no pueden seguir trabajando con unas temperaturas altísimas.
También significa hablar de una transición energética que nos permita no sólo hacer un despliegue de las renovables, sino también ser menos dependientes de terceros países, y significa apostar por una auténtica reindustrialización verde. Debemos hacer una apuesta para que la industria sea otra vez el motor de Catalunya, y debe ser una industria verde.
Ya sé que se lo han preguntado en muchas ocasiones, pero ¿por qué hasta ahora el programa electoral del espacio recogía la propuesta de un referéndum de autodeterminación para resolver el conflicto político catalán y ahora ya no hace?
"Todos los avances se producen dialogando y pactando"
De hecho, en el programa electoral de Catalunya en Comú sí aparece. Lo que nosotros decimos es que la vía que ha permitido avanzar en la situación que teníamos en Catalunya es el diálogo y esto significa que probablemente somos la única fuerza que dijo la verdad y que hemos cumplido con lo que nos comprometimos.
Nos presentamos diciendo libertad, diálogo y soluciones y hemos tenido los indultos, la mesa de diálogo y la reforma del código penal. El referéndum no llegará mañana ni en una semana y nadie se cree que pueda pasar si tenemos un gobierno con el señor Abascal de vicepresidente.
Es evidente que es Yolanda Díaz quien puede garantizar que avanzamos no sólo en términos nacionales, sino en términos sociales. Y esto significa hablar. Todos los avances se producen dialogando, pactando y avanzando, y éste es el futuro que nos espera si hay un gobierno de coalición.
Estoy convencida de que Yolanda Díaz será la presidenta y el único partido político a nivel estatal que mire hacia Catalunya y que la cuide para avanzar y para que los catalanes y las catalanas podamos votar sobre cuál debe ser nuestro futuro político.
Yolanda Díaz ha propuesto que el próximo año, en 2024, los catalanes votemos un hipotético acuerdo surgido de la mesa de diálogo entre gobiernos. ¿Sobre qué debe versar este acuerdo?
Creo que hay que poder hablar de todo, en la mesa de diálogo y en los parlamentos. Queremos hablar, por supuesto, del derecho a decidir, pero queremos hablar de otras muchas cosas. Tenemos el pacto de financiación caducado desde 2014, queremos hablar de ello, también del blindaje de las lenguas, queremos hablar de Rodalies.
Cierto es que en los últimos presupuestos generales ha habido una inversión importantísima, pero esto está yendo demasiado lento y se está viendo que es insuficiente. No puede ser que la primera vez que ha habido una ministra de infraestructuras catalana haya errado tanto en las prioridades, apostando por la ampliación de El Prat, que es negacionismo climático, en vez de apostar por el transporte que claramente utiliza la inmensa mayoría de trabajadores de este país, que es Rodalies.
¿Cómo están las relaciones con ERC?
"ERC ha llevado a cabo una campaña errática y se ha confundido de enemigo"
Siempre he sido muy clara y tiendo la mano a ERC y a todos aquellos partidos políticos que quieran seguir avanzando y mejorar la vida de la gente. Creo que ERC ha llevado a cabo una campaña errática y se ha confundido de enemigo al señalar que le da más miedo la señora Yolanda Díaz que el señor Abascal, es un error.
Además, no sólo desconecta con la realidad y el sentido común, sino con el propio sentir de los votantes de ERC. Pero de lo que se trata es de mirar hacia adelante y hacia el día 23, cuando espero que toda la gente progresista de este país entienda que debemos ir juntas a ganar a la derecha y a la extrema derecha. No se me ocurre una mejor forma de defender a Catalunya.
Si nos situamos en un escenario de un gobierno en el Estado de PP y Vox, coincidirá conmigo en que habrá derechos y colectivos probablemente en riesgo. ¿Cómo debería afrontarse?
Yendo a votar. Si nuestra gente va a votar, ganaremos estas elecciones. La gente debe ser consciente de lo que nos estamos jugando, y creo que lo es, y no quiero plantearme ningún tipo de escenario que no sea seguir teniendo un gobierno de coalición. Hasta el día 23 esa posibilidad no existe.
Hace ocho años se vivía un momento muy diferente: los Comuns ganaron dos elecciones generales seguidas y llegaron, por primera vez, a la alcaldía de Barcelona. Se hablaba mucho de la nueva política. ¿Tiene la sensación de que esta idea ya ha pasado a la historia?
A veces nos gusta utilizar adjetivos, precisamente para marcar un poco las distintas épocas que existen en la política. Creo que lo importante es que ocho años después hemos conseguido un proyecto cohesionado.
La primera gran confluencia fue aquí, en Catalunya, y me siento muy orgullosa de que fuéramos pioneros y el ejemplo que ha facilitado también que exista un proyecto como Sumar, que aspira a una España plurinacional y entiende que esto no va sólo de una ciudad o de un país gestionado completamente de forma radial. Y lo digo por España, pero también por Catalunya, y que aspira a que podamos seguir avanzando juntas. Y tenemos muchas propuestas para seguir adelante.