Blindaje total a la declaración judicial de la infanta Cristina como imputada por el caso Nóos. Como era de esperar, el juez José Castro ha emitido una providencia por la cual establece que las respuestas de la hija del rey a lo que le pregunte el próximo 8 de febrero solo se grabarán en audio, pero no en vídeo. El magistrado ya anunció el sábado que se plegaba a la petición de la defensa de la infanta, con lo que se evitan que se difundan imágenes de la encausada declarando.

Además, no se entregará copia de la grabación a ninguna de las partes, aunque sí su transcripción cuando sea recogida por escrito.

Lo habitual es que las declaraciones sean captadas en vídeo para posteriormente ser plasmadas en formato papel, excepto si la parte afectada solicita expresamente que su deposición sea transcrita al mismo tiempo que se le interroga. Así sucedió en la primera declaración de Iñaki Urdangarin, efectuada en febrero de 2012, quien pidió que el interrogatorio no fuese grabado, como así sucedió.

Pero, además, el juez ha prohibido expresamente a cualquier persona que acceda ese día a los juzgados de Palma que pueda introducir cualquier tipo de aparato tecnológico. 'Se prohíbe terminantemente que persona alguna acceda al interior del edificio portando terminal telefónico, tablets, ordenador portátil o cualquier otro dispositivo apto para la captación de imágenes o sonidos', ordena el juez instructor en una providencia dictada este martes.

Una medida que también se aplicará él mismo así como los fiscales anticorrupción. Tan solo se quedan al margen de tal imposición los funcionarios adscritos al servicio de guardia o de la Clínica Médico Forense.