Opinión
PSOE(Q+)
Por Sato Díaz
Coordinador de Política.
Actualizado a
El PSOE volverá a tener complicado, en el verano de 2025, participar en la gran manifestación del Orgullo LGTBIQ+ que recorre anualmente el eje Prado-Recoletos de Madrid. Pese a que desde la organización del 41 Congreso Federal celebrado este fin de semana en Sevilla se apresuraban en sacar banderas arcoíris y repartirlas entre el público del mitin final, el daño está ya hecho a un colectivo harto de soportar ataques gratuitos e injustificados desde diferentes lugares.
Tras un par de años de calma en el gran desfile del Orgullo, una vez el Gobierno de coalición aprobaba la ley trans impulsada por la anterior ministra de Igualdad, Irene Montero, el PSOE vuelve a posiciones reaccionarias en este sentido. El boicot al cortejo y pancarta del partido de Pedro Sánchez en la mani del Orgullo ya se barrunta entre algunos colectivos LGTBIQ+ y transfeministas.
“Que viva la lucha de las mujeres”, gritaba un grupo de veteranas militantes socialistas la noche del sábado en el Palacio de Congresos y Exposiciones sevillano, una vez finalizado el debate de enmiendas para el documento político saliente del 41 Congreso. Con este grito, celebraban haber excluido de la hoja de ruta política del partido a las personas queer y a las identidades indicadas bajo la denominación plus (+) del colectivo LGTBIQ+. De esta manera, en el documento socialista la nomenclatura utilizada será LGTBI.
La sigla "Q" hace referencia a las personas queer, que rechazan las clasificaciones hegemónicas del sistema binario varón/mujer o heterosexualidad/homosexualidad. El signo "+" incluye a los colectivos que no están representados en las siglas anteriores, así incluiría identidades como el género fluido o las personas no binarias, así como otras orientaciones sexuales como la pansexualidad o la asexualidad.
Además, el 41 Congreso del PSOE ha ido un paso más allá y ha aprobado una enmienda que veta la participación de personas del "sexo masculino" en competiciones deportivas para mujeres. Una enmienda que, con otras palabras, viene a decir que las mujeres trans no son mujeres y, por lo tanto, no podrían participar en competiciones deportivas femeninas. Toda una declaración de intenciones.
Militantes y dirigentes LGTBIQ+ del partido se mostraban desolados este domingo en Sevilla. En el debate de enmiendas, estas dos cuestiones recibieron una fuerte resistencia, pero no fue suficiente. Ferraz no se organizó para hacer frente a este retroceso. El PSOE va para atrás en materia de derechos LGTBIQ+ y desde colectivos sociales y partidos de izquierdas ya está habiendo una rápida contestación. El partido de Sánchez reabre una polémica que parecía estar ya concluida.
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