El futuro del suspendido presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, parece escrito, aunque el camino hasta su destitución definitiva en el mundo del fútbol no ha hecho más que empezar. La FIFA, máxima autoridad en el deporte, lo ha apartado de todos sus cargos durante tres meses, el tiempo en el que su Comité Disciplinario dirime si su comportamiento durante y después del polémico beso a Jenni Hermoso incumple varios artículos de su código de conducta y desacredita a federación mundial.

Pero sobre la mesa ya no está solo ese beso forzado o que se agarrara los genitales a modo de celebración durante la final del Mundial femenino. Política y socialmente parece claro que Rubiales ha traspasado todas las líneas rojas: niega que el beso no fuera consentido, culpa a la futbolista de "acercarle el cuerpo", trata de desacreditarla públicamente, insulta a quienes lanzaron las primeras críticas y remata la jugada denigrando al "falso feminismo" que trata de "asesinarlo socialmente".

El cúmulo de salidas de tono y la reacción beligerante calcando el argumentario más machista precipitaron su caída y confirmaron, a nivel político, que su continuidad era insostenible. Esta es la segunda gran victoria del equipo femenino tras ganar el Mundial, un grupo que se ha mostrado sólidamente unido en torno a su compañera y que ha hecho valer los nuevos consensos sociales que han traído los avances feministas de los último años.

Concentración en Callao

El movimiento feminista es consciente de que ahora toca empujar, no solo para la caída definitiva de Rubiales, sino para evitar retrocesos y apoyar a las jugadoras de la selección. Las 23 y decenas de compañeras profesionales se han negado a competir con el equipo hasta que no haya cambios profundos en la cúpula de la RFEF, que ha respaldado a su presidente y trata de negar la versión de Hermoso, que se sintió "vulnerable y agredida".

Por eso, la asociación Feminismos Madrid ha convocado para este lunes una concentración en apoyo de Jenni Hermoso y el resto de las jugadoras de la selección femenina de fútbol.

El colectivo ha informado en la red social X que la concentración tendrá lugar a las 20.00 horas en la plaza de Callao con el objetivo de "reivindicar un deporte libre de violencias machistas". Bajo el lema #SeAcabó, en el cartel de la convocatoria se puede leer "contigo Jenni, con las campeonas del mundo".

Aunque más allá de las protestas en la calle, la oleada de apoyo feminista de incontables figuras públicas o de las Naciones Unidas es ya incontestable. En una entrevista este domingo en 20 Minutos, la ministra de Igualdad en Funciones, Irene Montero, ha sido tajante: "Como ministra y feminista, debo llamar a las cosas por su nombre: un beso no consentido es violencia sexual", ha asegurado. La figura del consentimiento, clave en para la ley del solo sí es sí, ha encontrado en el caso Rubiales un ejemplo ilustrativo y mediático.

Reunión de la RFEF

La protesta tendrá lugar después de la primera reunión de la RFEF sin Rubiales al mando, aunque la dirección ha pasado a manos de su colaborador más cercano, Fernando Rocha, único de los nueve vicepresidentes que no fue destituido en la Asamblea Extraordinaria del viernes.

Rocha ha dado instrucciones para reunir en Las Rozas (Madrid) para celebrar una reunión "extraordinaria y urgente" de la Comisión de Presidentes de Federaciones de Ámbito Autonómico y Territoriales. Será a las 16.00 horas y el primer punto del orden del día lleva por título "análisis y evaluación de la situación actual y evaluación de las decisiones o actuaciones a adoptar". También habrá turno para "ruegos y preguntas.

Con mucha probabilidad se tratará la situación de los once miembros del cuerpo técnico de la selección, que el sábado pusieron sus cargos a disposición de la RFEF en un comunicado en el que censuraban sin paliativos la actitud de Rubiales y defendían a Hermoso y al resto de la plantilla.

No estaba entre ellos el seleccionador femenino, Jorge Vilda, muy cercano a Rubiales. El entrenador no dudó en levantarse aplaudir al presidente suspendido durante su discurso incendiario, al igual que el seleccionador del equipo masculino, Luis de la Fuente.

Ambos cedieron ayer a la presión interna y externa e hicieron públicos sendos comunicados en los que censuraban la actitud de Rubiales en un momento en el que cada vez más voces criticaban su actitud y ante el posible peligro de sus puestos de trabajo. El futuro de Vilda es otra de la grandes incógnitas que deben despejarse, ya que su destitución puede ser un factor determinante para que las campeonas del mundo vuelvan a jugar en la selección.

A nivel político, el Gobierno mantiene la línea dura contra Rubiales y sigue a la espera de que el Tribunal Administrativo del Deporte empiece a cursar las denuncias que le ha elevado el Consejo Superior de Deportes. Este domingo, la vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, insistía en que Rubiales "no puede volver a dirigir el fútbol en España" porque es una "persona que miente y que ha hecho gala de no haber entendido nada de lo que significa la lucha por la igualdad en un área tan importante con el deporte".

Por su parte, la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social en funciones, Yolanda Díaz, se reunirá este lunes con la presidenta del sindicato mayoritario del fútbol femenino (Futpro), Amanda Gutiérrez, con representantes de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) y con una delegación de la Liga de Fútbol Femenino. Futpro ejercer actualmente la representación de Hermoso y también ha sido blanco de las críticas de la RFEF, que llegó a acusar de la jugadora de estar "abducida" por su sindicato y de mentir.

En el plano internacional, la imagen de España ha quedado seriamente manchada y el Gobierno trata de amortiguar el daño que este episodio pueda tener de cara a la candidatura que se quiere presentar para albergar la celebración del Mundial 2030. Incluso el alcalde de Londres, Sadiq Khan, o la ministra de Exteriores alemana, Annalena Baerbock, han expresado su repulsa a la situación.

"Imaginen a Angela Merkel [excanciller alemana] haciéndoselo a Lahm [excapitán de la selección]. Se habría abierto la caja de los truenos. A todo el mundo le habría parecido increíble y eso lo dice todo", señalaba Baerbock tras asistir a un encuentro femenino del club Turbine Potsdam. 

Hermoso no ha vuelto a pronunciarse tras su comunicado, en el que criticaba a Rubiales por su discurso y negaba tajantemente su versión sobre el consentimiento del beso.  El sábado reapareció públicamente en el palco durante la final de la Women's Cup que han disputado el Atlético de Madrid y el Milan en el Centro Deportivo Wanda Alcalá de Henares. Recibió una fuerte ovación de los asistentes y numerosos clubes y federaciones de fútbol de diferentes países están mostrando su apoyo a la jugadora española.

También se han empezado a ver las primeras muestras de respaldo entre los clubes masculinos. Los jugadores del Cádiz y del Sevilla mostraron pancartas y camisetas con su nombre antes de sus respectivos encuentros de Liga del sábado. Se han hecho esperar, pero cada vez son más los representantes masculinos del futbol los que tienen que pronunciarse sobre el tema por iniciativa propia, como Andrés Iniesta, o a preguntas de la prensa, como el presidente del Barça, Joan Laporta. Más vale tarde que nunca.