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La hija de la escritora Alice Munro la acusa de haber ignorado los abusos sexuales que sufrió por parte de su padrastro

Su expareja, que murió en 2013, fue sentenciado en 2005 a dos años de libertad condicional y a no mantener contacto con niños menores de 14 años por los abusos a la hija de Munro.

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La escritora canadiense Alice Munro en una foto de archivo. — GEORGE WALDMAN / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO / Europa Press

madrid, Actualizado:

Andrea Robin Skinner, una de las hijas de la escritora canadiense Alice Munro, ha denunciado este domingo que su madre ignoró los abusos sexuales que sufrió de niña por parte de su expareja. El segundo esposo de la novelista fallecida el pasado 13 de mayo abusó de Skinner cuando ella tenía nueve años, según describió recientemente la víctima en un artículo publicado en el periódico The Toronto Star. 

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"En 1976, fui a visitar a mi madre, Alice Munro, durante el verano a su casa de Clinton, Ontario. Una noche, mientras ella estaba fuera, su marido, mi padrastro, Gerald Fremlin, se metió en la cama donde yo dormía y me agredió sexualmente", relata en el medio canadiense meses después de la muerte de su progenitora. 

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Skinner describe en el escrito cómo el esposo de la narradora aprovechaba los momentos en los que estaban solos para mostrarle sus genitales, realizar comentarios soeces, hablar de otras niñas del vecindario o comentar con ella las necesidades sexuales de su madre.  

El ex esposo de Alice Munro le enseñaba los genitales a su hija de nueve años cuando se encontraban solos

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Una de las primeras personas en conocer los hechos transcurridos ese verano fue Jim Munro, padre de Skinner, quien decidió no hacer nada al respecto y guardar silencio. De hecho, siguió enviando durante años a su hija a pasar los veranos con su madre y Fremlin. 

Años más tarde, cuando Skinner tenía 25 años, contó a su madre lo sucedido pero su reacción fue de indignación ante la "infidelidad" de su pareja, quien también había mantenido relaciones con otros menores del vecindario. "Respondió exactamente como temía que haría, como si se hubiese enterado de un adulterio y me contó sobre los otros niños con los que Fremlin mantenía amistades, subrayando su propia sensación de que ella, personalmente, había sido traicionada", señala en el artículo.    

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Skinner, hija de Alice Munro: "Mi madre reaccionó  como si se hubiera enterado de un adulterio"

La novelista, considerada por algunos críticos como "la Chéjov canadiense", no llegó a considerar en ningún momento a su hija como víctima, como ésta le reprocha en varias ocasiones.

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Munro siguió habitando con Fremlin hasta que él murió en 2013 porque "le quería mucho" y porque la "cultura de misoginia" era responsable de que Skinner creyese que la escritora tenía que "negar sus propias necesidades".

Además, dos años después de que Skinner dejara de tener relación con ella tras el nacimiento de su primer hijo, en una entrevista con The New York Times, Alice Munro expresó su "inmenso amor" por quien fue el abusador de su hija. A los pocos meses de publicarse dicha entrevista, Fremlin fue sentenciado a dos años de libertad condicional y a no mantener contacto con niños menores de 14 años durante ese periodo por los abusos cometidos contra Skinner.  

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Un alegato contra el silencio de las víctimas

Una de las razones que la impulsaron a hacer pública su historia fue acabar con el silencio mantenido durante décadas por miedo a manchar la fama de su progenitora. "A la sombra de mi madre, un icono literario, mi familia y yo hemos ocultado un secreto durante décadas. Ha llegado el momento de contar mi historia", destaca en el artículo.

Pero Skinner pretende también visibilizar una situación de la que todavía son víctimas miles de niños, cuyos testimonios son a menudo ignorados: "En mi caso, la fama de mi madre significó que el secreto fue más allá de mi familia. Mucha gente influyente se enteró de parte de mi historia y aún así la siguieron ayudando a perpetuar una narrativa que sabían era falsa", concluye. 

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