Reino Unido congelará a partir de octubre las facturas energéticas y levantará el veto al 'fracking'
La primera ministra, Liz Truss, ha anunciado este paquete de medidas y ha trasladado que su Gobierno abordará las causas fundamentales de los altos precios para que nunca vuelvan a estar "en la misma posición".
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madrid, Actualizado:
El Gobierno de Reino Unido congelará temporalmente las facturas de gas y electricidad a partir del mes de octubre con un tope anual de 2.500 libras (2.874 euros). El periodo de esta medida excepcional será de dos años. También retirarán el veto a la fracturación hidráulica (fracking) en el país.
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Así lo ha trasladado a la opinión pública la primera ministra, Liz Truss, que ha defendido que el objetivo es hacer frente a los altos precios de la energía y apoyar "a este país durante este invierno y el próximo". Por esta razón, ha señalado, abordarán las causas fundamentales de los altos precios para no volver a estar en "la misma posición".
De hecho, la representante ha añadido que su Ejecutivo "apoyará también a todos los negocios, las organizaciones benéficas y las organizaciones del sector público con sus costes energéticos durante este invierno, ofreciendo una garantía equivalente durante seis meses". Después de ese periodo, ha detallado que proporcionarán apoyo a los sectores más vulnerables, como la hostelería y el comercio.
Truss: "Esto estabilizará el mercado"
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Truss ha explicado que esta decisión aliviará la presión energética sobre los hogares y permitirá a las familias ahorrar cerca de 1.000 libras esterlinas (1.150 euros). Pero no es la única medida que sacarán adelante, también impulsarán un plan de 46.000 millones de euros para garantizar que las empresas que operan en el mercado mayorista obtengan la liquidez necesaria para evitar la volatilidad de los precios. "Esto estabilizará el mercado y disminuirá la probabilidad de que los minoristas de energía necesiten nuestro apoyo como lo hicieron el invierno pasado", ha apuntado la líder británica.
Asimismo, el Gabinete conservador pone fin a la línea que adoptó en 2019 de no apoyar la facturación hidráulica (fracking) y levantará el veto a este modo de extracción de gas de esquisto. Truss ha informado que esta práctica podrá retomarse en un plazo de seis meses.
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Liz Truss asumió las riendas del Gobierno de Reino Unido después de que Boris Johnson dimitiera. Estas son sus primeras decisiones al frente y las ha detallado en la Cámara de los Comunes, donde ha expresado que la meta es paliar los efectos del aumento de los precios de la energía y el impacto que estos tienen en las familias. De hecho, está previsto que las facturan sufran un aumento del 80% a partir de este octubre.