Los rebeldes sirios derrocan el régimen de Asad, que huye del país
Al Asad ha dimitido y se encuentra junto a su familia en Moscú, según agencias de noticias rusas. El primer ministro sirio, Mohamed Ghazi al Jalali, se ha ofrecido a colaborar con los insurgentes para preservar las instituciones.
Damasco-Actualizado a
Las fuerzas rebeldes de Siria encabezadas por el grupo yihadista Organismo de Liberación del Levante han anunciado este domingo la caída de la capital del país, Damasco, tras una ofensiva relámpago de apenas 12 días que ha provocado el colapso del régimen del presidente sirio, Bashar Al Asad, cuya familia llevaba en el poder desde 1971.
El Kremlin afirmó que Bashar al Asad había "dimitido de su cargo" y abandonado Siria.
"Tras las negociaciones entre Bashar al Asad y varios participantes en el conflicto armado en el territorio de Siria, decidió dimitir de su cargo presidencial y abandonó el país con instrucciones de llevar a cabo la transferencia del poder de forma pacífica", dijo la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova.
Según agencias de noticias rusas, tanto el presidente como su familia habrían recibido asilo en Rusia. "Asad y los miembros de su familia llegaron a Moscú. Rusia les concedió el asilo por motivos humanitarios", indicó la fuente a las agencias TASS y Ria Novosti.
El director del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Londres, Rami Abdulrahman, ha asegurado que es un "día de la libertad para el pueblo sirio después del fin de 54 años de gobierno de la familia Asad en Siria".
El Observatorio asegura también que el presidente sirio abandonó el aeropuerto de la ciudad en un avión "especial".
Abu Mohamed al Jolani, líder islamista de la coalición insurgente que ha arrebatado a Al Asad la capital Damasco, ha proclamado hoy la victoria.
"Oh, mis hermanos revolucionarios rezad a Dios para agradecerle por la victoria que nos ha dado a través de vuestros brazos", aseguró en un comunicado.
Al Jolani lidera la coalición insurgente encabezada por el Organismo de Liberación del Levante, que se escindió en 2016 del Frente al Nusra, la filial siria de Al Qaeda, que inició la ofensiva contra Al Asad el pasado 27 de noviembre.
Además de Damasco, también se confirmó la caída en manos de los rebeldes de la ciudad de Homs, al norte de la capital y la toma del control de Deir al Zur, en el este del país y controlada hasta ahora por fuerzas kurdosirias.
Así, sólo quedarían en principio fuera del control de la insurgencia las provincias costeras de Tartús y Latakia, la primera el centro principal de poder de la familia Al Asad -dominada por la minoría religiosa alauita- y la segunda dónde se encuentran las principales bases militares rusas, el principal aliado del ya depuesto líder.
Pese a que en un primer momento se reportaron disparos y explosiones en Damasco, la toma de la ciudad se ha hecho con relativa calma y con pedidos por todas las partes -no solo Al Jolani- para preservar la tranquilidad, evitar la violencia y "venganzas".
No obstante, los insurgentes han anunciado un toque de queda en la capital siria de trece horas. "El Mando de Operaciones Militares anuncia el toque de queda en la ciudad de Damasco a partir de las 4 de la tarde y hasta las 5 de la madrugada", según un escueto comunicado de los rebeldes.
El primer ministro sirio, dispuesto a colaborar con los rebeldes
El primer ministro sirio, Mohamed Ghazi al Jalali, aseguró este domingo que tiende su mano a "todo sirio que se interesa por este país para preservar sus instituciones", en un vídeo publicado después de que los insurgentes islamistas tomaran el control de la capital, Damasco.
"Estoy en mi casa, no la he abandonado porque pertenezco a este país y no conozco ningún otro país. Es mi patria. En estas horas en las que la gente siente preocupación y temor (...) Yo, por las instituciones del Estado, que no son mi propiedad ni de cualquier otra persona, sino que son de cada ciudadano sirio. Extendemos nuestra mano a todo sirio que se interesa por este país para preservar sus instituciones", dijo.
"Este asunto lo abordará cualquier liderazgo que elija el pueblo sirio, y estamos dispuestos a cooperar con ella para ofrecer todo tipo de facilidades y para entregar (transferir) los expedientes gubernamentales sin problemas y de forma sistemática para preservar las instituciones del Estado", afirmó en un vídeo grabado en vertical y de más de tres minutos.
Al Jalili aseveró que "siempre" ha estado trabajando "día y noche en el sector privado y público y en el gobierno buscando los intereses de esta patria".
"Vemos a Siria para todos los sirios. Este país puede ser un Estado normal que tiene relaciones con sus vecinos sin entrar en alianza o bloque regionales", apuntó.
Por ello, dijo extender "la mano hasta a los opositores que extendieron también su mano y afirmaron que no perjudicarán a cualquier persona que pertenece a esta patria", refiriéndose a las palabras de ayer de los insurgentes.
"A todas las fuerzas militares de la ciudad de Damasco se les prohíbe terminantemente acercarse a las instituciones públicas, que permanecerán bajo la supervisión del ex primer ministro hasta que sean entregadas oficialmente, y también se les prohíbe disparar balas al aire", aseguró el comandante Ahmed al Sharaa, del Mando de Operaciones Militares, en un comunicado acompañado de la imagen del líder islamista, Abu Mohamed al Jolani.
Los insurgentes anuncian en televisión la caída de Al Asad
Los insurgentes irrumpieron este domingo en la televisión oficial siria y anunciaron que han "liberado" la ciudad de Damasco, ha "caído el tirano Bashar al Asad" y han "liberado a todos los oprimidos de las prisiones del régimen".
En un mensaje desde el plató de televisión, un hombre proclamó que "con la gracia de Dios, se liberó la ciudad de Damasco, y cayó el tirano Bashar al Asad y se liberaron todos los oprimidos de las prisiones del régimen", según el que es el primer comunicado de la Sala de Operaciones de Damasco de los insurgentes.
"Se liberó la ciudad de Damasco, y cayó el tirano al Asad y se liberaron a los oprimidos de las prisiones del régimen"
Se anunció pues la liberación de cientos de prisioneros retenidos en las cárceles de Al Asad, entre ellas la militar de Saydnaya, uno de los más notorios centros de represión, lo que fue saludado por los rebeldes como "el momento de regresar a casa y el momento de la libertad después de décadas de opresión y sufrimiento".
"La Sala de Operaciones de Damasco pide a los ciudadanos preservar las propiedades del país sirio libre", dijo el hombre no identificado, rodeado de otros ocho hombres vestidos de civiles. "Que Siria viva libre para todos los sirios en todos sus segmentos", dijo en el minuto de aparición.
Mientras, miles de personas se congregaron en la plaza de los Omeyas, uno de los puntos neurálgicos de la ciudad, donde están, además de la televisión, las sedes del ministerio de Defensa y del Ejército.
Declaraciones de la oposición a Al Asad
Hadi Al Bahra, presidente del máximo órgano político de la oposición siria en el exilio, la Coalición Nacional Siria (CNFROS), aseguró también que la situación en Damasco es "segura excepto para algunas almas débiles que puedan aprovechar estas condiciones".
"La Coalición Nacional confirma a la comunidad internacional que continúa trabajando para completar la transferencia del poder a un órgano de gobierno de transición con plenos poderes ejecutivos, para lograr una Siria libre, democrática y pluralista", dijo en un comunicado.
El líder del CNFROS también afirmó a EFE este domingo que la capital "estará asegurada en dos o tres días", cuando la situación se estabilice.
Al Bahra, al frente de una coalición de 37 grupos, indicó que la oposición diferencia entre "asistente político, burócrata y tecnócrata" y que estos dos últimos permanecerán en sus puestos, mientras que se necesita "un cambio de ministros y de primer ministro" en Siria.
En este sentido, recordó que la hoja de ruta a seguir se basa en la resolución 2254 del Consejo de Seguridad de la ONU, que estipula un periodo de transición de 18 meses en Siria, la redacción de una nueva Constitución y la celebración de "elecciones libres".
Así, pidió a la población permanecer en sus casas, además de señalar que "no habrá casos de venganza, ni represalias, ni violaciones de los derechos humanos. Se preservará y se respetará la dignidad de la gente".
Por su parte, la líder de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza armada liderada por kurdos, aseguró este domingo que la caída del gobierno sirio del presidente Bashar al Asad que ésta es una "oportunidad para construir una nueva Siria".
"En Siria vivimos momentos históricos: asistimos a la caída del régimen autoritario de Damasco. Este cambio representa una oportunidad para construir una nueva Siria basada en la democracia y la justicia, que garantice los derechos de todos los sirios", dijo en un escueto comunicado.
Reacciones internacionales al nuevo panorama sirio
El presidente estadounidense, Joe Biden, aseguró este domingo que Estados Unidos "hablará con todos los grupos sirios" en un proceso de transición liderado por Naciones Unidas y atribuyó este domingo la caída en Siria de Bashar al Asad a la debilidad de Irán y Rusia.
También el presidente electo, Donald Trump, ha señalado los conflictos que envuelven a Rusia e Irán como la razón de la caída de Al Asad, ya que el presidente ruso Vladimir Putin ya "no está interesado en protegerlo".
"Rusia e Irán están muy debilitados en este momento, uno por Ucrania y una mala economía, y el otro por Israel y sus éxitos militares", explicó el próximo mandatario estadounidense, que asumirá en la Casa Blanca el 20 de enero.
Por su lado, Rusia solicitó este domingo una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU para abordar la situación en Siria tras el derrocamiento de su presidente.
Irán afirmó este domingo que el futuro de Siria lo debe decidir su pueblo sin intervenciones externas tras la caída del gobierno del presidente Bashar al Asad, hasta ahora aliado de Teherán.
Estas declaraciones suceden después de que la televisión estatal iraní asegurase que la embajada de Irán en Siria fue "saqueada" por los rebeldes.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aseguró este domingo que es "un día histórico en Oriente Medio" tras la huida de Siria de Bachar al Asad y la caída de su régimen, en una visita a las tropas israelíes desplegadas en los Altos del Golán ocupados, frente a la frontera con Siria.
Precisamente, el Ejército israelí anunció este domingo que ha desplegado tropas dentro del área desmilitarizada de los Altos del Golán ocupados, en la frontera con Siria, así como "en otros lugares necesarios para su seguridad".
El mensaje llega poco después de que la red de activistas Daraa24 asegurase que las fuerzas israelíes han entrado en la ciudad siria de Al Baaz, después de que "individuos desconocidos abrieron fuego contra una patrulla" en los Altos del Golán, algo que el Ejército no llegó a confirmar.
El enviado de Naciones Unidas a Siria, Geir Pedersen, pidió el domingo "esperanzas cautelosas" tras la toma de Damasco por los rebeldes islamistas, que calificó de "momento decisivo".
Pedersen dijo en un comunicado que los casi 14 años de guerra civil en Siria han sido "un capítulo oscuro (que) ha dejado cicatrices". "Hoy miramos hacia el futuro con cautelosas esperanzas de apertura... paz, reconciliación, dignidad e inclusión para todos los sirios".
España apoya una solución pacífica en Siria y que se mantenga la integridad territorial
El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha asegurado este domingo que España apoyará que cualquier solución en Siria "sea pacífica" y "que se mantenga la integridad territorial" del país.
En declaraciones realizadas a TVE, Albares expresó el deseo del Gobierno español de que no se produzca "una especie de (...) balcanización de distintas regiones de Siria en manos de distintos grupos".
Para el ministro "la primera prioridad es esa muy pequeña colonia de españoles (...), se trata de cinco españolas casadas con sirios", además de cuatro cooperantes, con los que Exteriores está ya en contacto.
Cientos de refugiados regresan a Siria desde Líbano tras la caída de al Asad en Damasco
Cientos de refugiados sirios residentes en el Líbano están cruzando este domingo la frontera de regreso a su país tras la captura de Damasco.
En el principal cruce fronterizo entre el Líbano y Siria, el de Masnaa, largas hileras de vehículos aguardan para entrar al territorio sirio en medio de un ambiente festivo entre gritos de "Alá es grande" y consignas contra el que dirigió el país durante casi 25 años, según constató EFE desde el cruce.
El Gobierno de Líbano estima que alrededor de 1,5 millones de refugiados sirios viven en el Líbano, de los cuales más de 800.000 restarían registrados en la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Desde el inicio del conflicto en 2011, cientos de miles de sirios huyeron del territorio por temor a la represión del Gobierno y el Ejército sirio, una gran parte hacia el Líbano.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.