Puerto Rico Las claves para entender las protestas en Puerto Rico

Puerto Rico está inmerso en una ola de protestas que exigen la dimisión de su gobernador, Ricardo Roselló, por su presunta implicación en un escándalo de corrupción y por la participación en un chat privado con contenido homófobo y sexista, denominado a las mujeres como "puta" o "gatita". Este viernes miles de puertoriqueños volvieron a marchar desde Bahía Urbana hasta La Fortaleza para pedir la dimisión del gobernador.

El malestar empezó la semana pasada, cuando el FBI arrestó a dos exfuncionarios de Roselló como parte de una investigación de corrupción; pero se acentuó con la filtración de 889 páginas de chats de Telegram, plagada de comentarios machistas y homófobos, en el que participaba el gobernador puertorriqueño y algunos miembros de la cúpula de su Administración, ha destacado gran indignación en la isla.

Estos episodios han creado que miles de puertoriqueños, entre los que se encuentran artistas como Ricky Martin, Residente, Tommy Torres, Bad Bunny o Benicio del Toro, hayan pedido la dimisión del gobernador.

Se cumple una semana de las protestas que conforman unas movilizaciones para las que es difícil encontrar precedentes. Estas son algunas claves que las explican

Corrupción: la gota que colma el vaso

Los continuos casos de corrupción han ido generando un malestar en la ciudadanía que se ha ido incrementando y que ha colapsado con la filtración de los mensajes del chat. No hace falta irse muy atrás para encontrar otro caso de corrupción y es que el último vio la luz semanas antes de que se difundieran los polémicos mensajes. 

Un juez federal acusó a varios exfuncionarios y contratistas del Gobierno de conspirar para cometer fraude, robo, fraude electrónico, lavado de dinero y conspiración para lavado de dinero. Rosselló entonces dijo que su gobierno "no tolerará la corrupción".

Después de este caso estalló el de los mensajes en un grupo de Telegram. La publicación de la totalidad de las casi 900 páginas del chat supusieron una convulsión que ha provocado una crisis institucional sin precedentes. "Quiero anunciar que he tomado la determinación de prescindir de manera inmediata de la colaboración de todos los allegados a mi administración que forman parte del chat que se reveló hoy en su totalidad", dijo Rosselló en un comunicado.

"Esas conversaciones tenían lugar entre el gobernador y sus secretarios de gabinete; y en ellas participaban también personas allegadas a Roselló que no tienen ningún puesto público, empresarios que tienen intereses económicos y que buscaban contratos con el gobierno", explicó a BBC Mundo Carla Minet, directora ejecutiva del CPI.

El huracán María 

Hace casi dos años desde que el huracán María pasó por las isla pero la isla se sigue recuperando del fenómeno meteorológico. Las críticas no han cesado desde la fecha por cómo el Ejecutivo de Rosselló ha gestionado la crisis. 

El Gobierno de Puerto Rico elevó a 2.975 la cifra de personas que perdieron la vida como consecuencia de los estragos causados por el huracán a su paso por la isla en septiembre 2017, casi un año después del suceso. Una cifra ampliamente por encima de los 64 fallecidos que figuraron durante cerca de 12 meses en el balance oficial.

Y es que no fue hasta finales del mes de agosto de 2018 cuando el gobernador portorriqueño, Ricardo Rosselló, dio por válidas las conclusiones de un informe que su Administración había encargado a la Universidad George Washignton y que tenía en cuenta las víctimas atribuibles directa o indirectamente al huracán entre septiembre de 2017 y febrero de 2018.

Con todo, la Universidad de Harvard a la que los manifestantes están haciendo referencia estima que, en total, murieron 4.645 personas. 

La crisis económica

A estos motivos se le suma el complicado momento que atraviesa Puerto Rico en lo económico desde hace ya más de una década. Rosselló declaró la isla en quiebra en el año 2017 con el fin de reestructurar la deuda que sumaba más de 70.000 millones de dólares. 

Ante esta situación, el gobernador creó la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) para Puerto Rico, una entidad de control federal que ha aplicado impopulares recortes en la isla, desde despidos hasta cierres de escuelas.