La Policía desaloja a porrazos la acampada proeuropea en Kiev

La Policía antidisturbios ha cargado la madrugada de este sábado contra la acampada proeuropea erigida en la capital, Kiev, con porras y granadas aturdidoras para dispersar a los manifestantes que se concentraban en la plaza de la Independencia y que se ha saldado con decenas de detenidos y heridos.

Los agentes policiales irrumpieron en la plaza cuando aún permanecían alrededor de un millar de personas acampadas en la céntrica plaza tras la protesta celebrada el viernes por la noche contra la decisión del presidente ucraniano, Viktor Yanukovich, de declinar el acuerdo comercial con la Unión Europea (UE). Testigos presenciales han relatado que los agentes antidisturbios recurrieron, en primer lugar, a las granadas aturdidoras para dispersar a la multitud para después entrar en la plaza y perseguir a varios manifestantes, muchos de los cuales han huido por las calles colindantes.

De acuerdo con el diputado opositor de la Rada (Parlamento) ucraniana Andréi Shevchenko, los jóvenes "fueron golpeados con porras, arrastrados por el suelo y golpeados en las piernas, y al menos una treintena fueron llevados a hospitales". "La plaza la han limpiado de forma salvaje. Hay decenas de heridos. Decenas de detenidos. Esto nunca se había visto en Ucrania", afirmó Shevchenko en su cuenta de Twitter. La Policía antidisturbios acordonó la plaza en torno a las 5.00 horas del sábado (4.00 hora peninsular española), escenario de las protestas cada vez más multitudinarias, con hasta 10.000 personas. Entre los detenidos, se encontraría un fotógrafo de la agencia Reuters.

El pretexto de la irrupción de las fuerzas de seguridad en la plaza fue los ocho días de "violaciones" y la colocación de un árbol de Navidad, según medios locales, que también han informado de detenciones indiscriminadas. Desde el pasado 21 de noviembre, miles de personas protestan en el centro de Kiev para exigir a las autoridades que firmaran un Acuerdo de Asociación con la Unión Europea.

El presidente ucraniano, Víctor Yanukóvich, aseguró ayer en Vilna, donde se celebró la cumbre entre la UE y los países de la Asociación Oriental, que su país mantiene la intención de firmar el documento llamado a acercar a esta antigua república soviética a los valores y estándares de la Unión Europea. Pero el mandatario insistió en su reciente propuesta de celebrar negociaciones tripartitas (Ucrania, UE y Rusia), una posibilidad rechazada tanto por el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, como por el líder del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.

Yanukóvich insistió en poner condiciones, principalmente económicas, para la firma del Acuerdo de Asociación. Kiev cifra en 160.000 millones de dólares el monto necesario para la homologación de su industria y su producción, sin contar con el coste que supondría en dinero y empleo la pérdida del mercado ruso por su acercamiento a Bruselas.