Obama acelera su plan cubano
Los rumores sobre la salud de Fidel Castro empujan el cambio de Washington
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"En Washington se piensa y se habla de la Cuba post Castro". El equipo de transición de Obama, con el que ha hablado Público, tiene diseñado ya un plan político para la transición cubana. Los rumores sobre el deterioro de la salud de Fidel Castro (catapultados por Hugo Chávez) no se han tomado del todo en serio en Miami. Sin embargo, el debilitamiento de la salud del comandante en jefe ha acelerado los planes cubanos del nuevo presidente de EEUU.
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Los asesores de Obama consultados por este diario, que prefieren mantenerse en el anonimato, proponen que EEUU dé el primer paso para dialogar con el Gobierno de Cuba, sin esperar a que libere a los presos políticos o cumpla otras condiciones previas. Por otro lado, Jake Colvin, vicepresidente de Asuntos Comerciales Globales del Consejo Nacional de Comercio Exterior es tajante: "El contacto viene primero y la negociación después. Creo que podemos hablar sin precondiciones".
Desde el pasado martes, el Departamento de Estado está muy pendiente de los movimientos de tropas y seguridad que se producen en Cuba. A su vez, fuentes de Washington aseguraron a Público que "no hay nada definitivo, aunque sí hay señales y síntomas para estar atentos al estado de salud de Fidel".
Su larga ausencia, el hecho de que no publique sus "reflexiones", el no haber recibido a los presidentes que han visitado recientemente la isla y las palabras de Chávez, atraen la atención hacia las cábalas sobre la muerte del líder de la revolución. Aunque el mandatario venezolano se haya desdicho, el deterioro de la salud de Fidel parece un hecho. Las consecuencias políticas de su muerte podrían tener un efecto fulgurante.
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Armando, un joven cubano, que vive en Miami, está seguro de que "después de la muerte del dictador, los cambios se verán". "Aquí están obsesionados con Fidel afirma "y lo que de verdad preocupa es qué pasará entre Cuba y USA ahora que Obama asume la presidencia. Mientras, pasa el tiempo y Raúl gana capacidad de maniobra". Por su parte, el alcalde de Miami, Carlos Álvarez comentó la semana pasada que "nadie sabe lo que pueda ocurrir si muere Fidel".
El gobierno de la ciudad, eso sí, ha decidido que las manifestaciones masivas por la muerte de Fidel se realizarán en cualquier calle miamense, porque "la seguridad está garantizada". Armando concluye con la típica ironía cubana: "No se puede negar que Fidel Castro, hasta moribundo, tiene un poder de convocatoria ¡del carajo!". Mientras, numerosos cubanos aseguran que "el exilio debe acercarse a la disidencia en Cuba y apoyarla".
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