Protestas en el Rif Marruecos detiene a ocho periodistas que cubrían las protestas en Alhucemas
Reporteros Sin Fronteras denuncia que el régimen de Mohamed VI obstaculiza el trabajo de los comunicadores locales y extranjeros que informan de las revueltas en el Rif mediante agresiones físicas, arrestos y cortes de las telecomunicaciones
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RABAT,
Al menos ocho periodistas marroquíes que cubrían la multitudinaria revuelta de la región del Rif, en Marruecos, han sido detenidos desde la manifestación en Alhucemas del pasado jueves, acusados de "incitar" a la población a manifestarse.
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Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha acusado a las autoridades marroquíes de obstaculizar el trabajo de los periodistas locales y extranjeros que cubren las protestas en el norte de ese país, que se suceden cada vez con más apoyo popular desde el pasado octubre. "La situación de los periodistas marroquíes y extranjeros que cubren los acontecimientos en el norte de Marruecos continúa deteriorándose", ha explicado en un comunicado la directora de la oficina de RSF para el Norte de África, Yasmine Kacha.
Según el Centro Nacional de Derechos Humanos, varios de los periodistas detenidos han sido torturados y maltratados
Según Kacha, el régimen del rey Mohamed VI está convirtiendo esta región, de forma gradual, en una zona sin acceso a información independiente mediante ataques físicos a periodistas presentes en las manifestaciones, detenciones de informadores y bloqueo de las telecomunicaciones.
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Por ello, RSF exige a las autoridades marroquíes que "liberen a todos los periodistas detenidos", al mismo tiempo que condena "todos los ataques físicos cometidos contra los profesionales de la prensa durante la cobertura de estos eventos".
Entre los ocho comunicadores marroquíes que han sido arrestados durante su cobertura de las revueltas del Rif destaca el periodista Hamid Mahdaui, detenido el pasado jueves en Alhucemas por "incitar" a la población a manifestarse, según las autoridades.
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Sin embargo, varios de estos periodistas detenidos hacen frente a duras penas, que incluyen la de muerte, tras ser acusados, entre otros delitos, de atentar contra la seguridad del Estado.
Expulsión de periodistas extranjeros
Asimismo, RSF acusa a las autoridades marroquíes de expulsar del país a periodistas extranjeros que siguen los acontecimientos en el Rif y de acosar a otros.
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Tanto esta organización como varios profesionales extranjeros consultados que cubren las protestas en Alhucemas aseguran que frecuentemente se corta internet y hay interferencias de las comunicaciones telefónicas en la ciudad durante las protestas, algo que complica el trabajo de los periodistas.
El comunicado de RSF añade que los periodistas detenidos se declararon en huelga de hambre para protestar por su arresto y según un informe del Centro Nacional de Derechos Humanos, una institución oficial, varios de ellos fueron torturados y maltratados.
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El pasado jueves, la ciudad de Alhucemas fue escenario de protestas masivas del movimiento rifeño Al Hirak al Shaabi (Movimiento Popular) que fueron reprimidas de forma violenta por la policía marroquí.
Durante ese día, la ciudad rifeña estuvo bajo el apagón mediático debido a los cortes de internet y a la alteración de las comunicaciones telefónicas, lo que obstaculizó la labor de los profesionales de la prensa que cubrían esas manifestaciones. Según informó el diario Alyaoum24, el fotógrafo de ese portal electrónico marroquí Abdelmayid Razqu resultó herido a causa de una pedrada lanzada por la policía.
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Las protestas sociales del Rif estallaron en octubre de 2016 tras la muerte de un vendedor de pescado aplastado dentro de un camión de basura y desde entonces han sido detenidos casi 200 activistas.