Al menos una persona ha muerto y otra permanece desaparecida a causa de la tormenta Daniel que azota este martes Grecia central y que ha inundado calles y varias viviendas.

En la ciudad de Volos, una de las más afectadas, un ganadero de 70 años ha fallecido sepultado por un muro que se vino abajo debido a un deslizamiento de tierra. También hay un desaparecido, un hombre de 42 años que fue arrastrado por una corriente de agua, según ha informado la cadena de televisión ERT.

Las autoridades han prohibido la circulación de vehículos en algunas zonas, mientras que la recomendación general pasa por evitar riesgos. El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, ha reconocido en una reunión con la presidenta, Katerina Sakellaropoulou, que es "extremadamente difícil" hacer frente a un temporal de esta magnitud sin la colaboración de la ciudadanía.

Los meteorólogos anticipan que las condiciones climatológicas seguirán siendo complicadas hasta el próximo jueves, con especial preocupación por lo que pueda ocurrir en el centro del país pero también en la península del Peloponeso, en el sur. 

Este temporal llega después de un fatídico verano que vivió Grecia, con varias oleadas de calor tórrido y decenas de incendios que quemaron más de 150.000 hectáreas, cerca del 1,2% del territorio heleno, y dejaron 28 muertos.

Las lluvias torrenciales han logrado contener la amenaza que durante semanas han supuesto los fuegos. De hecho, este lunes los bomberos pudieron contener un enorme incendio en la región de Evros, en el noreste del país, después de pasar 17 días luchando contra las llamas.