Los jóvenes tomarán hoy La Habana para el concierto de Juanes por la paz

Todo atado y bien atado. El Concierto por la Paz ideado por Juanes en el corazón de La Habana revolucionaria, y que tantos rencores ha provocado en el exilio más reaccionario de Miami, reunirá hoy a decenas de miles de cubanos, que tendrán su mayor enemigo en el sol de justicia que asfixia la ciudad.

Miguel Bosé, Víctor Manuel y Luis Eduardo Aute, junto a una decena de músicos latinoamericanos, se han sumado a la cruzada emprendida por el músico colombiano, convertido hoy en uno de los hombres más odiados por el exilio radical. Juanes continúa en el centro de la diana, pese al apoyo recibido, incluso por una treintena de disidentes encarcelados en la isla. Un odio que el país contempló boquiabierto gracias al documental emitido por la televisión oficial el jueves, en el que se repitieron las imágenes de intolerancia, incluyendo quema de discos y amenazas a la familia de Juanes. Y tras el que Abel Acosta, viceministro de Cultura, en una habitual pirueta política, aprovechó para cargar contra los mismos disidentes que sí apoyan a Juanes: "Existe una conexión muy clara entre el núcleo fascista de Miami y los mercenarios que hay aquí".

En La Habana nadie duda de que el Gobierno controlará todos los pormenores, con un vasto despliegue de Policía y de oficiales de paisano entre la gente. La UJC (la Unión de Jóvenes Comunistas) también aparecerá en los sitios más visibles, algo habitual en algunos de los conciertos en la isla. Todos estos detalles son irrelevantes para la mayoría de los jóvenes habaneros, dispuestos a disfrutar al máximo. "Yo voy a cantar y bailar, sobre todo a (la merenguera boricua) Olga Tañón, nuestra favorita", confiesa Yisel, de 21 años, junto a un grupo de amigos que el viernes buscaba el aire fresco del Malecón.

Juanes ha insistido hasta el hastío en que su concierto se trata de una "mano tendida" y, el arte, una "poderosa arma de paz". Ha evitado caer en el enfrentamiento con algunos de sus vecinos (él vive en Miami), un combate que no ha rehuido el músico más reconocido de la Cuba de los Castro: Silvio Rodríguez. El cantautor atacó duramente a los opositores al concierto, "la ultraderecha de Miami". Silvio lidera la escuadra cubana, compuesta por Orishas, AmauryPérez y los Van Van, entre otros.

Pero hay otros músicos cubanos que no estarán en el mismo escenario donde Juan Pablo II ofició una misa histórica hace más de una década. El cantante colombiano, movido por las mismas palabras que aquel día inmortalizó el pontífice polaco ("Que Cuba se abra al mundo, que el mundo se abra a Cuba"), ha intentado que el grupo más rebelde del país, Porno Para Ricardo, rock punk con mucha dinamita en sus letras, no faltara a esta cita. Misión imposible. El Gobierno cubano los tiene en su lista negra por canciones como El coma andante ("El comandante quiere que yo le aplauda, después de hablar su mierda delirante Usted es un tirano y no hay pueblo que lo aguante").

El actual presidente del país, Raúl Castro, tampoco se libra de unas letras directas que desconocen las correcciones políticas: "Raúl, Raúl, eres un farsante; Raúl, Raúl, a ti no hay quien te aguante".

Ciro Díaz, guitarra y uno de los líderes de la banda (junto a Gorki Águila, actualmente en México) aseguró a Público que "nunca pensamos que fueran a permitir semejante cosa". ¿Y qué canción habríais elegido para el concierto? "El coma andante, seguro. Si no, sería un monigote domesticado por el Régimen", añade Ciro. Tan difíciles de domesticar como los raperos cubanos, con letras como balas que critican los males de hoy en día.

A la cabeza, Los Aldeanos. "Se acabó el abuso, empezó el atropello" es el grito de guerra del nuevo disco de los habaneros Aldo y Bian Rodríguez. La Comisión Depuradora, que reúne a distintos grupos de hip hop, mantiene un discurso tan unificado como duro. Como el de los EskuadrónPatriota, cuyo último vídeo circula masivamente por Internet. Y como el de Maikel Xtremo, incluso el del propio Silvito el Libre, uno de los hijos de Silvio Rodríguez.

La música de Silvio ha iluminado a generaciones de cantautores habaneros, incluidos otros que tampoco tienen sitio junto a Juanes. Frank Delgado ("Yo te juro por mi madre que no veo mesas redondas", famoso y aburrido programa de la TV cubana), Ray Fernández o Eric Sánchez, que en la noche del jueves cantó en un pequeño local de Miramar para 20 personas. "Yo me iré a Varadero con mi novia, el fenómeno artístico de la camisa negra no me interesa", sentencia Eric. El concierto será retransmitido por la televisión cubana. El acontecimiento promete.