DRESDE.- Tras la incesante llegada de refugiados a Alemania, el ambiente de crispación sigue su escalada. La pasada semana, movimientos como el PEGIDA -movimiento de los Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente- se movilizaron en contra de la llegada de refugiados y la política de asilo alemana, llegando a mostrar una horca con mensajes amenazantes hacia Angela Merkel, canciller alemana, y Sigmar Gabriel, ministro de Economía de Alemania.

Por este motivo, la agencia de inteligencia interior alemana está vigilando de cerca estos movimientos contrarios al islam, según ha confesado un portavoz del Ministerio del Interior. "La muestra de esa horca la semana pasada es un claro ejemplo de que crece el reclamo y el potencial agresivo de este movimiento", ha declarado el portavoz en una conferencia de prensa. "Este desarrollo se vigila muy de cerca por las autoridades de inteligencia interna, tanto a nivel federal como estatal", ha añadido.

Dentro de estos movimientos xenófobos, el pasado domingo la candidata a la alcaldía de Colonia, Henriette Reker, fue agredida y acuchillada en la víspera electoral por un desempleado de 44 años, que al parecer militó en los noventa en las filas neonazis.

Por su parte, PEGIDA no cesa en sus protestas xenófobas y ha fijado la celebración de un acto en Dresde la noche del lunes en el que conmemorará el aniversario de sus marchas en la ciudad.

El ministro alemán de Justicia, Heiko Maas, ha condenado este lunes las actividades del citado movimiento xenófobo PEGIDA al considerar que "siembra el odio que después se convierte en violencia". Maas ha advertido quienes se unen a Pegida que "no tienen excusa" si deciden marchar junto a un movimiento fundado por una persona que llegó a disfrazarse como Adolf Hitler.

El aniversario del movimiento islamófobo llega dos días después de que un hombre acuchillara a la candidata favorita a la alcaldía de la ciudad de Colonia en un ataque presuntamente xenófobo. Varias organizaciones sociales se manifestarán también este lunes en Dresde para mostrar su rechazo a PEGIDA y en las redes sociales se extiende una campaña bajo el lema "yo soy Dresde" en el que ciudadanos de todos los ámbitos posan con carteles en favor de la tolerancia.