'¡A la calle!' El cuartel general de Michel Martelly, el cantante antisistema favorito del pueblo haitiano, clamó tras conocerse los resultados preliminares del Consejo Electoral, que apartaban al popular músico de la segunda vuelta electoral del 16 de enero. El odio acumulado contra el presidente René Préval y su yerno, Jude Celestin, estalló por todos los rincones. Las barricadas y los pequeños disturbios de la noche dieron paso ayer a multitudinarias manifestaciones, con haitianos cegados por la ira, y al colapso de todo el país.

La conservadora Mirlande Manigat (31,37%) y el gubernamental Jude Celestin (22,48%) se jugarán la presidencia del país destrozado por el terremoto del pasado 12 de enero y azotado por la epidemia de cólera. A sólo 6.845 votos del delfín de Préval se supone que ha quedado el cantante antisistema (21,84%). Pero la sombra del fraude es tan real que deja de ser una sombra. Un día antes, los 5.500 observadores haitianos auspiciados por la UE habían adelantado sus datos: Manigat, 30%; Martelly, 25% y Celestin, 20%. 'Pero sabemos que Préval no aceptó estos resultados y que ordenó cambiarlos', aseguró a Público uno de los asesores de Martelly.

El saldo inicial de la revuelta es de dos muertos y decenas de haitianos heridos

Nadie cree en los resultados oficiales, tras unas elecciones turbulentas, preñadas de irregularidades, donde los muertos votaban y los vivos no podían hacerlo, ya fuera por desorganización o intimidación. Algunas urnas estaban llenas desde la mañana y se compraban los votos por diez dólares.

La primera protesta internacional procedió de la embajada de EEUU: 'Conjuntamente con la comunidad internacional apoyamos los esfuerzos para revisar cuidadosamente las irregularidades'. Ban Ki-moon, secretario general de Naciones Unidas, ya lo había afirmado hace días: 'Las irregularidades parecen más graves de lo que creíamos'. Ayer, insistió en que 'estos resultados no son definitivos. Se insta a todos los candidatos a agotar los recursos legales y procedimientos formales'. Según la ley electoral, los candidatos pueden recurrir unos resultados que no serán definitivos hasta el día 20.

EEUU y la ONU refrendan las irregularidades en los comicios

Manigat y Martelly, que durante la jornada del 28 de noviembre se habían sumado a las acusaciones de fraude de 12 de los candidatos, se echaron atrás horas más tarde. ¿Por qué? Sus propios recuentos y las primeras cifras manejadas por la misión de la ONU (Minustah) les otorgaban, pese a todo, una clara victoria sobre Celestin. Una victoria difuminada con el paso de los días por arte de magia.

La situación es tal que uno de los miembros del Consejo Electoral propuso que los tres candidatos participaran en la segunda vuelta, tal vez para aligerar el sonrojo que le causaba la difusión de los datos.

'Si Sweet Micky no está, habrá fuego. ¡Préval, ladrón! ¡Martelly presidente!', se gritaba en todo el país, que vivió con máxima tensión el toque de queda decretado por el Gobierno. Barricadas y protestas en Puerto Príncipe, Cabo Haitiano, Los Cayos y en grandes ciudades. Tiroteos, enfrentamientos, gases lacrimógenos y asaltos de edificios, como la sede central de la Inite, el partido de Préval y Celestin, que fue pasto de las llamas. Al cierre de esta edición se habían contabilizado dos muertos y decenas de heridos. Manifestantes apedreaban la casa de Préval y el edificio de la televisión pública.

Préval compareció en televisión pidiendo calma y abriendo la posibilidad de que se revisen los resultados. Pero hace muchos meses que nadie hace caso al presidente zombi.