El diario 'The New York Times' adquiere por alrededor de un millón de euros Wordle, el juego que arrasa en internet
El medio apuesta por este tipo de entretenimiento para sus lectores después de haber dado una creciente importancia a los crucigramas y otras formas de pasatiempos para alcanzar su objetivo de llegar a 10 millones de suscriptores para 2025.
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Nueva york, Actualizado:
The New York Times ha comprado Wordle, el exitoso juego de palabras que triunfa en internet y que se ha extendido sobre todo entre usuarios de Twitter. El periódico de Estados Unidos ha comunicado que ha realizado esta compra por al menos un millón de dólares.
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De esta forma, el medio apuesta por este tipo de entretenimiento para sus lectores después de haber dado una creciente importancia a los crucigramas y otras formas de pasatiempos para alcanzar su objetivo de llegar a 10 millones de suscriptores para 2025.
"El Times sigue centrado en convertirse en una suscripción esencial para todos los angloparlantes que quieren entender y participar en el mundo", ha defendido la empresa. "El departamento de Juegos del The New York Times es una parte clave de esa estrategia", ha agregado. Por el momento, según ha señalado el diario en un comunicado, el juego continuaría siendo gratuito inicialmente.
El éxito de Wordle
El 1 de noviembre Wordle contaba con 90 usuarios, para el 2 de enero tenía ya más de 300.000, y en la actualidad son millones de personas las que juegan diariamente. Ahora, ha sido adquirido a su creador, Josh Wardle, un ingeniero de software de Brooklyn.
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El juego, en el que debe adivinarse una palabra de cinco letras en un máximo de seis intentos y que funciona en varios idiomas (también en español), se ha convertido en un éxito rotundo en menos de tres meses, después de que Wardle lo lanzara en una página web en octubre pasado tras comprobar la popularidad que tenía entre su familia. El usuario debe adivinar una palabra de cinco letras, y en cada uno de los intentos el juego tiñe de verde las letras que se encuentran en el lugar correcto, y en amarillo las que forman parte de la palabra pero están en el lugar equivocado.