Este artículo se publicó hace 14 años.
El catolicismo acogerá a cinco obispos anglicanos díscolos
Cinco obispos presentaron la renuncia en desacuerdo con el proceso que conducirá al nombramiento de mujeres obispos
La división de la jerarquía anglicana es un hecho. Cinco obispos presentaron ayer la renuncia en desacuerdo con el proceso que conducirá al nombramiento de mujeres obispos. Dos de ellos están ya retirados y los otros tres dirigen las diócesis de Fulham, Ebbsfleet y Richborough. Su siguiente paso será integrarse en la Iglesia católica con un estatus especial aceptado por el Vaticano.
Durante meses, el primado de la Iglesia anglicana, el arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, ha intentado sin éxito conjurar el cisma. El precio ha sido perder el apoyo de ambos lados.
Los tradicionalistas aceptaron con reticencias la llegada de la mujer al sacerdocio en los años noventa, pero nunca iban a aceptar el inevitable paso posterior y se oponen a que esta también ocupe puestos de mando dentro de la iglesia. Por su parte, los sectores reformistas anglicanos no han ocultado que se sienten decepcionados por la actitud de Williams, un abanderado de las causas progresistas que se vio forzado a ofrecer concesiones a los tradicionalistas para impedir su fuga.
El paso dado por los cinco obispos no es sorprendente si se tiene en cuenta que hace años ya habían dejado claras sus posiciones. Tres de ellos se ocupaban además de parroquias que habían votado en contra de que las sacerdotes dirigieran los servicios religiosos. Se espera que centenares de sacerdotes de la rama anglicana que recibe el nombre de "anglocatólica" acompañen a los obispos en su paso al catolicismo. La Santa Sede creará una nueva estructura para acogerlos, aunque no podrá abonarles una retribución económica tan alta como la que tenían en la Iglesia anglicana.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.