Este artículo se publicó hace 4 años.
Primarias demócratasBiden le muestra a Sanders la puerta de salida tras ganar con mucha holgura en Florida, Illinois y Arizona
El vicepresidente de Obama aventaja al senador por Vermont en casi 300 delegados, una distancia casi imposible de recuperar y más en una campaña que está en la cuerda floja por la emergencia nacional por el coronavirus.
Manuel Ruiz Rico
Washington-
La candidatura de Sanders podría estar viviendo sus últimas horas. El senador por Vermont volvió a perder ayer la batalla en una noche electoral en la que sufrió una derrota sin paliativos ante Joe Biden. Tras la suspensión de las primarias en Ohio debido a la pandemia del coronavirus, ayer terminaron votando Florida, Illinois y Arizona. Estos Estados aportan 441 delegados (219, 155 y 67, respectivamente) a la convención final demócrata de Milwaukee, unos números que hacían la cita de ayer la cuarta más importante de todas las primarias demócratas. Sanders perdió en los tres Estados y Biden lo adelanta ya en casi 300 delegados.
Se trata de una distancia prácticamente imposible de recuperar y más en un país sumido en una emergencia nacional por el coronavirus, donde va a ser muy difícil continuar desarrollando una campaña con normalidad. A Biden le quedan menos de 900 delegados para la nominación.
La derrota de Sanders fue clarísima: por casi 40 puntos en Florida, por más de 20 en Illinois y por más de diez puntos en Arizona. En cuanto a Biden, la jornada de ayer fue la cuarta noche electoral triunfal consecutiva del vicepresidente de Barack Obama.
Biden estaba muy descolgado tras las primeras primarias (Iowa, New Hampshire y Nevada) pero, tras eso, acabó ganando todas las citas siguientes: Carolina del Sur (29 de febrero), el supermartes (3 de marzo, 1.357 delegados en disputa), el minimartes (10 de marzo, 352 delegados) y ayer. Hasta el punto de que Biden ha vencido en 20 de los 29 Estados que han votado hasta ahora.
Sanders ya lo advirtió hace una semana: su candidatura ha ganado la batalla de las ideas pero está perdiendo la de la elegibilidad. Según una encuesta de ayer de la CNN, casi la mitad de los votantes de Arizona aseguraron que su prioridad para votar era la sanidad, un porcentaje que en Florida e Illinois era del 40%. El resto de asuntos: desigualdad de ingresos y el cambio climático. Justo los temas estrella de la campaña de Sanders. Si se ha debatido sobre eso en la campaña ha sido porque Sanders ha puesto esos asuntos sobre la mesa.
¿Qué le ha fallado entonces? El sondeo de la CNN revela que la mayoría de los votantes en esos Estados ha priorizado, sin embargo, apostar por un candidato que unifique al país. Además, dos tercios de los votantes en Arizona y Florida y el 60 por ciento en Illinois piensan que Biden es el mejor candidato para ganar a Donald Trump en las elecciones de noviembre.
Otra encuesta, ésta de la cadena ABC, mostró que el 71% de los votantes de esos Estados vinculaba su voto al candidato en que confiaban más para afrontar una crisis de envergadura.
Lo que revelan estos sondeos es lo que ya venían revelando: que Sanders es visto como alguien que polariza, que divide y que, por lo tanto, no sería buen candidato para ganar a Trump, y en los meses que llevamos de campaña no ha logrado quitarse esa sombra de encima.
Desde que Sanders ganó en Iowa, todo el establishment demócrata se puso a trabajar para presentarlo como un candidato extremista y radical y poco conveniente para la estabilidad del país. The New York Times llegó a publicar un reportaje sugiriendo que Sanders habría apoyado a la URSS a raíz de un viaje que éste hizo al país en 1988.
Además de esto, Biden llegó incluso a decir en un momento de la campaña que el senador de Vermont no era demócrata (jugando con el hecho de que Sanders es un independiente dentro del Partido Demócrata) y durante toda la campaña no ha dejado de repetir como una letanía sorda la consigna: "La gente quiere soluciones, no revoluciones".
Antes incluso de conocerse los resultados en Arizona, Biden compareció a través de internet, debido al coronavirus, desde Delaware, su Estado, y se dirigió sin ambages a los votantes de Sanders: "Permítanme decirles esto especialmente a los jóvenes votantes que han sido inspirados por el senador Sanders: los escucho, sé lo que está en juego, sé lo que tenemos que hacer".
Con un tono casi apagado y emocionado debido a la tensión ambiental de un país en estado de emergencia por el covid-19, Biden añadió: "Mi objetivo es unificar a este partido y después unificar el país. Sanders y yo", añadió para atraer de nuevo a los votantes de Biden a su causa, "compartimos una misma visión y sólo diferimos en la táctica".
Según The New York Times el coronavirus provocó una baja participación en Illinois (en Chicago habría caído casi a la mitad que en 2016), sin embargo, en Arizona y Florida la baja participación se evitó que se desplomara en parte porque estos Estados habían habilitado el voto temprano, que permite votar con varios días de antelación.
Con todo, The New York Times detectó ayer que la baja participación en Arizona había sido sobre todo de personas mayores de 45 años. Esto da una prueba de cómo cayó anoche la candidatura de Sanders puesto que, supuestamente, él y no Biden contarían con un apoyo amplio del votante de menos de 40 años.
Quedan aún varias noches electorales de importancia pero en medio de la pandemia de coronavirus que azotará a Estados Unidos en las próximas semanas, la candidatura de Sanders está en el aire y anoche los medios norteamericanos elucubraban sobre la idoneidad de su retirada.
Sanders ya lo advirtió hace una semana: su candidatura ha ganado la batalla de las ideas pero está perdiendo la de la elegibilidad
Con todo, la siguiente cita electoral de importancia en estas primarias demócratas será el 28 de abril, todo dependiendo del coronavirus. Ese día está previsto que se repartan 567 delegados en cinco Estados: Connecticut (60), Delaware (21), Nueva York (274), Pennsylvania (186) y Rhode Island (26).
Antes que ese día votará un goteo de Estados con pocos delegados: Puerto Rico (29 de marzo, 51 delegados), Alaska, Hawái y Wyoming (4 de abril, 53 delegados entre los tres), Wisconsin (7 de abril, 84 delegados).
La última cita serían las primarias de Kentucky el 23 de junio. Después vendría la convención final demócrata en Milwaukee del 13 al 16 de julio. En total se eligen en estas primarias 3.979 delgados, que serán los que decidan el candidato en dicho encuentro. Para ello, el vencedor debe reunir 1991 delegados.
Trump, por su parte, alcanzó ayer el número de delegados necesarios para proclamarse candidato del Partido Republicano. Era un mero trámite puesto que no tiene candidatos de peso al frente y ha ido ganando todas las primarias por más del 95 por ciento de los apoyos.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.