Esta es la ciudad con más iglesias de España

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Muchos templos religiosos son monumentos culturales que se convierten en referencias turísticas de las ciudades y los pueblos. En España, la inmensa mayoría son templos católicos: parroquias, iglesias, basílicas, santuarios, colegiatas, ermitas y catedrales. Pero ¿sabes cuál de las ciudades españolas tiene más iglesias? 

La lógica nos dice que debería ser Madrid porque es la ciudad más habitada, y después Barcelona. Pero, sin embargo, la ciudad con más iglesias es Sevilla, lo que también tiene su lógica: es una de las capitales más devotas de nuestro país siendo más que célebre su Semana Santa. Pero más justo sería decir que la ciudad con más iglesias es Antequera, ya que es la que más templos por habitante tiene, así que nos damos una vuelta por ambas ciudades andaluzas recorriendo algunas de sus muchas iglesias.  

Las iglesias más relevantes de Sevilla 

Iglesia de Santa María la Blanca de Sevilla - Fuente: Depositphotos
Iglesia de Santa María la Blanca de Sevilla – Fuente: Depositphotos

Solo por detrás de Roma. Y eso es mucho decir, teniendo en cuenta que el número de iglesias de la capital romana ronda las 900. Sevilla tiene “solo” 125, pero entre ellas encontramos algunos de los templos más venerados de España, como la basílica de Jesús del Gran Poder, nuestra primera visita por el patrimonio eclesiástico sevillano. 

Ubicada en la plaza de San Lorenzo, es un caso curioso entre las iglesias sevillanas ya que se trata de una construcción muy reciente: no tiene más de 60 años. Pero la verdadera joya del templo es la escultura que Juan de Mesa talló de Jesús del Gran Poder en 1620.  

Mesa, junto a Gregorio Fernández, son dos de las grandes exponentes del barroco escultórico español, que llevaron la talla en madera a un nivel no visto hasta ese momento en la imaginería religiosa. La talla del Jesús del Gran Poder, el “señor de Sevilla”, es una muestra del realismo descarnado que aún hoy emociona a los fieles.  

Basílica de La Macarena - Fuente: Wikipedia
Basílica de la Macarena – Fuente: Wikipedia

Y de la segunda basílica sevillana a la primera, La Macarena, fundada en 1941. Solo 25 años más tarde se convertía en la primera basílica menor sevillana, dignidad concedida por Pablo VI. En su museo se ofrece una visión de la Semana Santa sevillana. 

En la plaza del Salvador, damos un salto de más de 11 siglos para admirar una iglesia construida sobre la mezquita de Ibn Adabbás. Desde 1248 fue catedral de Sevilla y posteriormente fue convertida en la parroquia del Salvador: es considerado durante siglos el segundo templo en importancia de la ciudad, hasta que se reedificó en 1671 debido a su deterioro.  

Pero si queremos visitar la iglesia conservada más antigua de Sevilla nos tenemos que ir al barrio de Triana para admirar la iglesia de Santa Ana que empezó a construirse en 1266 por orden de Alfonso X, 20 años después de la toma de la ciudad por parte de Fernando III. Fue la primera iglesia extramuros de la primitiva Sevilla. El devastador terremoto de Lisboa de 1755 dañó la iglesia que se remodeló. 

Si te gustan las fachadas barrocas, estilo que en España tuvo mucho éxito (más, al menos, que el Renacimiento), debes pasarte por la iglesia de San Luis de los Franceses considerada la obra maestra de Leonardo de Figueroa, alarife municipal de Sevilla. Si tu fachada te gusta, el interior te enamorará: uno de los espacios barrocos más exuberantes de España. 

San Luis de los Franceses - Fuente: Wikipedia
San Luis de los Franceses – Fuente: Wikipedia

En la plaza de San Marcos visitamos ahora una joya del gótico-mudéjar, otro estilo que definió la arquitectura peninsular durante décadas y que ha tenido una notable influencia posterior. La iglesia de San Marcos también se asienta sobre una antigua mezquita. La influencia islámica es evidente al exterior con las ventanas geminadas enmarcadas por alfiz o la decoración de paños de sebka.  

Y terminamos este recorrido por un puñado de las 125 iglesias hispalenses en el interior de una de las iglesias más bonitas de España. Santa María la Blanca pasó de iglesia visigoda, a mezquita, y de mezquita a sinagoga y, desde 1391, otra vez a iglesia cristiana. Pero a mediados del XVII se remodela y se hace un homenaje al barroco más vibrante con una impresionante cubierta de yesería a lo que hay que sumar las pinturas murales de Murillo. 

Una vuelta por las iglesias de Antequera 

Antequera - Fuente: Unsplash
Antequera con la torre de la iglesia de San Sebastián – Fuente: Unsplash

Si Antequera tiene 42.000 habitantes y 33 iglesias nos sale a un templo cristiano por cada 1272 habitantes. En el caso de Sevilla sería a una iglesia por cada 5500 sevillanos. Y en el caso de Roma a una iglesia por cada 3100 romanos. Así que, a falta de estadísticas más concretas, Antequera es la ciudad del mundo con más iglesias por habitante.  

Al norte de la plaza de Fernández Viagas se ubica uno de los templos más relevantes de Antequera, la iglesia del Real Monasterio de San Zoilo, el cual empezó a construirse en 1500, pero del que solo se conserva la iglesia, que recibió una importante remodelación que incluyó una cubierta de yeserías manieristas que se sumó a la armadura mudéjar en la nave central. 

Santa María la Mayor - Fuente: Depositphotos
Santa María la Mayor de Antequera – Fuente: Depositphotos

Otra visita imprescindible dentro del patrimonio arquitectónico eclesiástico es la Insigne Iglesia Colegial y Mayor Parroquial de San Sebastián, o simplemente iglesia de San Sebastián, construida a mediados del XVI con portada plateresca construida por Diego de Guevara. La torre de ladrillo de 60 metros de altura erigida a principios del XVIII es uno de los símbolos de la ciudad. Siguiendo la calle La Paz hacia el sur se llega a la iglesia de Santo Domingo, de portada sobria pero interior con gran presencia de las remodelaciones neoclásicas. 

Pero no te puedes ir de Antequera sin visitar la Real Colegiata de Santa María La Mayor, ubicada en la calle San Salvador, considerada la primera iglesia de planta salón levantada en Andalucía, en la primera mitad del siglo XVI.

El mismísimo Julio II, mecenas de Miguel Ángel, le otorgó bula para transformar la antigua iglesia de Santa María de la Esperanza en colegiata, tipo de centro católico que posee un cabildo sin ser catedral. Se trata también de uno de los primeros ensayos renacentistas en Andalucía, tratando de superar el gótico: su imponente fachada lo atestigua.  

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