Si quieres aprender o mejorar tu nivel de inglés u otra lengua, lo mejor es practicar el idioma mientras viajas. Pero tal vez pienses que eso puede salir caro, sobre todo, si tienes idea de apuntarte a cursillos o escuelas en el extranjero, además del tiempo disponible que puedan requerir.
No obstante, hay varias posibilidades a tener en cuenta y que no debes desperdiciar. Selecciona cuál viene mejor a tus intereses y situación personal. Estas son las mejores opciones para aprender idiomas mientras viajas con poco dinero. ¡Toma nota de todas ellas!
Couchsurfing
El couchsurfing es una forma económica de viajar y aprender idiomas al mismo tiempo. Puede traducirse como surfear en el sofá, haciendo referencia al hecho de que alguien te deje dormir en ese mueble tan típico de su casa o quedarse a dormir en ella. Y es que, en esencia, se trata de eso, de que te den gratis alojamiento, aunque con ciertas particularidades.
No podemos ignorar que las plataformas de couchsurfing donde puedes encontrar este tipo de casas de particulares constituyen una red de hospitalidad en la que la gente que participa te permite dormir en su casa de manera gratuita para fomentar el intercambio cultural. Este resulta enriquecedor para todos, tanto para aquel que te aloja como para ti como viajero. Y, llegados a este punto, no podemos olvidar la importancia del aprendizaje de un idioma. Por ello, el concepto de couchsurfing va más allá de dormir gratis en una casa. Debes relacionarte con sus habitantes, realizar actividades juntos e intercambiar experiencias.
Algunas de las plataformas y aplicaciones de couchsurfing en las que puedes informarte y buscar anfitrión, además de Couchsurfing, son BeWelcome y Warmshowers, esta última especializada en la comunidad ciclista que va con su bici por el mundo. De manera similar, funcionan plataformas como Homestay, que pone en contacto a familias anfitrionas con estudiantes y viajeros para que se alojen en su casa y convivan con ellos a un precio asequible.
Alojamientos de familiares o amigos
Si tienes amigos o familiares en el extranjero, esta es una estupenda oportunidad para aprender o perfeccionar el idioma del país en el que aquellos se encuentran. Te ahorrarás un hotel, ellos sabrán aconsejarte sobre los sitios a los que acudir, incluso si quieres apuntarte a algunas clases, y podrás poner en práctica lo que sabes. Pero deberás caer en la tentación de tener todo el rato conversaciones en tu idioma natal. Recuerda evitar hablar en tu propia lengua todo lo que puedas para sacar el máximo partido a la experiencia.
En el supuesto de que no tengas amigos o familiares fuera, pero estos sí conozcan a gente que lo esté, dispuesta a alojarte, aprovecha la oportunidad para conocer gente nueva y aprender o perfeccionar un idioma.
Prácticas y trabajo de voluntariado
Las opciones de colaborar como voluntario con alguna ONG u organización en el país que desees es otra posibilidad. Además de aprender otro idioma de manera económica, estarás realizando una acción solidaria y ganando experiencia laboral para tu currículum, sin olvidar cómo contribuirá la experiencia a tu crecimiento personal.
Hay planes en el extranjero donde puedes consultar las diversas opciones disponibles, como la plataforma y comunidad de voluntariado de Worldpackers o la de Workaway, en las que se intercambia trabajo por alojamiento. El funcionamiento en ellas es muy sencillo. Tú ayudas al anfitrión y, en compensación, tienes gratis el alojamiento, la comida e incluso las clases o actividades diversas.
Además, no solo puedes colaborar con particulares, sino también con posadas, ecoaldeas, cámpines, hostels, proyectos sociales y ONGs en más de 140 países. Entre estas últimas hallarás trabajo en escuelas sin fines lucrativos y enseñanza y aprendizaje de idiomas.
Selección de destinos pequeños y baratos
Sea cual sea el plan que tengas en mente, la elección del lugar resulta primordial si no conoces a nadie en el destino que pueda alojarte o descartas otras posibilidades. En ese caso, lo mejor es que elijas lugares pequeños, los cuales son más baratos a todos los efectos. Además, los pueblos y aldeas te permitirán practicar el idioma con mayor facilidad. La hospitalidad de un lugar donde se conoce casi todo el mundo, la vida es más pausada y los precios más económicos de hostales y hoteles te facilitarán aprender y mejorar el inglés o cualquier otro idioma.
En todo caso, no olvides nunca evitar utilizar el móvil. Cada vez que necesites algo o desees que te indiquen una dirección, habla con los lugareños. Es en esos pequeños detalles donde notarás cómo empiezas a adquirir soltura en otra lengua y verás qué amable y paciente es la mayoría de la gente cuando vean que te esfuerzas por comunicarte en su idioma.
¡Prepara un presupuesto, valora cada una de las opciones y anímate a aprender un idioma mientras disfrutas del placer de viajar!
