Seguro que lo has visto ya muchas veces en tu ciudad: una persona que camina con cuatro o cinco perros. No, no son todos suyos (generalmente), son paseadores de perros que se dedican a esta actividad como forma alternativa de ganar dinero o como labor a tiempo completo.
¿Te gustaría ser paseador de perros? ¿Tienes un perro y no lo puedes sacar a pasear por falta de tiempo? A continuación, os presentamos la guía oficial para paseadores de perros, con todo lo que necesitas saber sobre esta actividad cada vez más demandada.
¿Qué hacen los paseadores de perros?
El propio término lo indica, ¿no? Principalmente, un paseador de perros se dedica a sacar a uno o varios perros de otras personas a pasear durante un tiempo determinado a cambio de una contraprestación económica. Pero tal vez el término sea algo reduccionista ya que un paseador de perros no solo pasea a los animales.
Durante el tiempo que el dogwalker se ocupa de los perros es el responsable de los mismos, lo que supone asegurarse no solo del bienestar de los perros que pasea, sino también del respeto al resto de animales y humanos con los que se puedan cruzar, además de velar por el mantenimiento del entorno.
Así mismo, debe estar preparado para actuar adecuadamente ante una urgencia lo que implica tener un conocimiento de las necesidades, características y salud canina, así como de la legislación vigente en materia de bienestar animal.
Como vemos, el paseador de perros no solo “saca el perro a pasear”, sino que debe tener una formación y experiencia con animales adecuada para desarrollar la actividad con eficiencia, garantía y seguridad. Así que no, no todo el mundo puede ser un (buen) paseador de perros sin una preparación previa: necesitas una mínima formación y/o experiencia.
¿Necesitas formación? ¿Y titulación?
En España no existe actualmente un certificado o una titulación específica para paseadores de perros. Por lo tanto, en este sentido, cualquier persona puede pasear el perro de un tutor, ya sea a cambio de una contraprestación económica o como labor desinteresada.
Sin embargo, si quieres ser paseador de perros como actividad habitual, ya sea a tiempo parcial o a tiempo completo, precisarás una formación específica, al margen de la experiencia que puedas tener en el cuidado de animales, particularmente perros.
Una formación en etología puede ser de mucha ayuda para desarrollar esta labor con mayor profesionalidad: un etólogo canino estudia el comportamiento de los perros, comprendiendo y modificando, en caso de que sea necesario, la conducta del animal.
También es importante tener unos conocimientos básicos en adiestramiento canino, en primeros auxilios y en resolución de conflictos, así como en la propia fisiología de los perros. Por supuesto, haber tenido o tener a tu cargo uno o varios perros ayudará también como experiencia.
¿Existen cursos para formarse como paseador de perros?
Actualmente, existen cursos y programas de formación de entidades privadas sin carácter oficial ya que, como hemos dicho, no existe una regulación oficial sobre esta actividad. Pero, sin duda, esta clase de cursos ayudan a los alumnos a adquirir conocimientos y destrezas específicas para desarrollar su labor de paseador de perros de forma adecuada, además de ser una buena carta de presentación para conseguir trabajo, ya sea directamente con clientes o en guarderías o negocios vinculados al cuidado y adiestramiento canino.
¿Ser paseador de perros es una profesión?
Si entendemos como una profesión regulada aquella donde solamente puede llevarse a cabo su ejercicio mediante regulaciones o normativas legales, no se trata de una profesión puesto que no existe actualmente en España ninguna regulación, normativa o certificado oficial que reconozca a los paseadores de perros profesionales.
Pero, a tenor de los cambios que estamos viviendo en los últimos tiempos en materia de bienestar animal y el crecimiento del número de perros en las familias y el consiguiente crecimiento de las necesidades de los mismos, no cabe duda de que la figura del paseador de perros no tardará en estar regulada y tendrá un reconocimiento profesional.
Facultades y destrezas de un buen paseador de perros
Como hemos visto, un paseador de perros debe asumir diferentes responsabilidades además de sacar los perros a la calle: debe tener una formación básica en cuidado y comportamiento canino para hacer su labor con garantías.
A continuación, detallamos estas facultades y destrezas que debe tener un buen paseador de perros, consultando también la guía editada en Reino Unido por la bicentenaria Royal Society for the Prevention of Cruelty to Animals (RSPCA), Real Sociedad para la Prevención de la Crueldad con Animales.
Conocimiento del comportamiento y cuidado del perro
Un paseador de perros debe, ante todo, entender las necesidades específicas de los perros que pasea. Para ello es conveniente tener una formación general en la domesticación, adiestramiento y sistemas generales de comportamiento canino.
En este sentido, no hay que olvidar las funciones que cumple un paseo para un perro. Por un lado, hacer ejercicio físico. Los perros necesitan andar y correr para activar su cuerpo, pero también para divertirse.
Así mismo, el paseo es el momento en el que los perros entran en contacto con otros animales y humanos, además del entorno por lo que es una parte fundamental de su educación para la convivencia, especialmente en entorno urbanizados que no son especialmente propicios para ellos.
Por otro lado, el paseador de perros ha de tener de tener en todo momento un control sobre la conducta del perro, para lo que ha de ser una persona con aplomo y decidida ante situaciones imprevistas: debe ser capaz de garantizar la obediencia de los perros que pasea resolviendo los conflictos que se puedan presentar (con otros perros o con humanos) con serenidad.
Así mismo, debe tener destreza en la gestión de varios animales a la vez especialmente en el manejo de herramientas de control como correas, collares y arneses, ya que la mayoría de paseadores de perros llevan varios al mismo tiempo.
Responsabilidad en el cuidado del entorno
El paseador de perros no solo es responsable del bienestar y la seguridad de los perros que están a su cargo, sino también de que esos animales no pongan en peligro a otros animales o humanos, además de velar por el adecuado mantenimiento del entorno. En este sentido, por supuesto, ha de ocuparse de las deposiciones y las micciones de los perros, respetando las normativas legales al respecto.
Conocimiento de la legislación
¿Sabías que la nueva ley de Bienestar Animal prohíbe que los animales depositen sus excrementos y orines en lugares de paso habitual de otras personas, como fachadas, puertas o entradas a establecimientos, procediendo en todo caso a la retirada o limpieza de aquellos con productos biodegradables?
Pues deberías saberlo si eres un paseador de perros porque a partir de finales de septiembre esta y otras muchas disposiciones de la nueva ley entran en vigor y si no se cumplen, cualquier tutor o responsable de un animal puede ser denunciado.
Así pues, otra cualidad que debe tener un paseador de perros es conocer las normativas, regulaciones y leyes sobre animales domésticos. Por ejemplo, en relación al horario en que se puedan usar los parques públicos, cuándo pueden ir sin correa por los mismos, etc. Recuerda que, como paseador de perros, debes dar ejemplo, incluso a otros tutores de animales, respetando escrupulosamente las normativas.
Capacidad organizativa y tratamiento con clientes
Sea o no reconocida como profesión regulada, lo cierto es que cada vez más personas obtienen ingresos como paseadores de perros, incluso dedicándose a ello a tiempo completo. Por ello es importante tener una capacidad organizativa para desarrollar el trabajo adecuadamente y saber cuántos perros puedes pasear al día con eficiencia sin asumir más carga de trabajo de la que debes.
En este sentido, es importante organizar el tipo de perros que pasean juntos en base a sus características ya que no siempre se entienden bien los unos con los otros y eso puede ocasionarte conflictos.
Así mismo es importante pasar un tiempo con el perro y su tutor antes de pasearlo en solitario. Todo ello con el objetivo de conocer mejor las características específicas de cada perro y cuáles pueden ser sus necesidades durante el paseo. Porque esa es, no lo olvidemos, tu labor principal: atender las necesidades de los peludos mientras permanecen a tu cargo.