Tráfico reforzará la atención a los mayores de 65 años

La franja de edad que acumuló más muertos en carretera el año pasado fue la última de todas, los mayores de 65 años. De las 1.730 víctimas al volante durante 2010, 318 eran ancianos. "No nos había pasado nunca y por eso una de los objetivos del año próximo es reforzar la atención a los conductores mayores de 65 años", señaló este jueves Pere Navarro, director general de Tráfico. Este expuso las principales líneas de actuación de su departamento, entre las que destaca "la protección a los colectivos más débiles".

Durante su intervención en la Tribuna RACC, organizada por este club automovilístico en Madrid, Navarro explicó que "cada vez hay más conductores mayores de 65 años", por lo que la Dirección General de Tráfico (DGT) deberá repensar medidas dirigidas a este colectivo de riesgo, como por ejemplo, modificar el diseño de la señalización.

La prioridad de la DGT durante este año será, como ya avanzó el vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, la lucha contra el exceso de velocidad. Navarro no se plantea cambiar los límites. "En Dinamarca se hizo y los accidentes subieron un 20%. Aquí no cometeremos el error de tratar de arreglar lo que ya funciona", señaló.

Navarro hizo gala de "la buena salud" del carnet por puntos, cinco años después de su entrada en vigor, y se mostró a favor de instalar más radares en "rectas y vías rápidas". El director de Tráfico remarcó que no es necesario instalarlos en los puntos negros porque sólo el 8% de los accidentes con víctimas suceden en estos tramos.

Navarro abrió la puerta al pago por uso de las carreteras, como propuso la Asociación Española de la Carretera y el Real Automóvil Club de España (RACE). "Se podría pensar" en este sistema, dijo, para "conservar" la red vial.

Europa se ha propuesto reducir un 50% los muertos en las carreteras en 2020, un reto que España logró con creces la década pasada. Aun así, Navarro quiso diferenciar entre "el objetivo político" que marca Europa, sin decir cómo hacerlo, y lo que dicen los técnicos que es posible hacer en España". Fuentes de la DGT calculan que la caída de la siniestralidad no superará el 40%.