Para los conservadores de la Comunitat Valenciana la presencia del vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, como representante de la dirección nacional del partido en su acto de apertura del curso político es más que suficiente. O al menos eso sostuvo este martes Vicente Betoret, portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Popular en Les Corts. Preguntado sobre la cuestión en rueda de prensa, el dirigente conservador mantuvo que el acto, que se celebrará en Teulada (Alicante) el próximo día 27 se realizará 'con toda la normalidad' y que con el valenciano González Pons el partido 'está perfectamente representado'.

Con el presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, imputado por cohecho en el caso Gürtel, Mariano Rajoy lleva desde el pasado 14 de marzo sin acudir a la comunidad autónoma. Máxime cuando está pendiente la ratificación del president como candidato para las próximas autonómicas.

El dirigente conservador afirmó que el debate sobre los dirigentes nacionales que acudirán a la cena de apertura del curso político no 'tiene mucha más importancia que el puro morbo que se genera'. En este sentido, remarcó que cuando el año pasado asistió a ese acto el presidente del PP, Mariano Rajoy, 'fue un tema absolutamente extraordinario' porque hasta ese momento 'no había venido ningún dirigente nacional y no había pasado nada'.

A su juicio, 'si los máximos dirigentes nacionales tuvieran que ir, comunidad por comunidad, a las cenas de inicio de campaña los pobres hombres, si me permiten la expresión, acabarían absolutamente locos, porque estarían toda la semana rodando por ahí', informa Europa Press.

'Parece ser que ha confirmado que vendrá un dirigente nacional, que además tenemos el orgullo de que sea valenciano', que es Esteban González Pons, y, por lo tanto, subrayó Betoret, 'el partido está perfectamente representado de dirigentes autonómicos, dirigentes nacionales y dirigentes provinciales'. 'No pasa nada si no viene nadie más', insistió.

Pese a las palabras de Vicente Betoret, en privado, el entorno de Camps muestra su malestar por el hecho de que ni Rajoy ni su número dos, María Dolores de Cospedal, vayan a asistir a este acto. Y aseguran que todavía hay tiempo para que la dirección nacional del partido se replantee enviar un apoyo mayor a este acto con tintes de precampaña electoral.