El Ayuntamiento de Barcelona pulsa el acelerador en la remodelación de una de las partes de la ciudad más emblemática que dejó la gran transformación de los Juegos Olímpicos del 92 cómo es el Port Olímpic. El consistorio ha aprobado una partida cercana a los 22 millones de euros para iniciar las obras en dos de los principales espacios de la zona portuaria.

El proyecto persigue dejar atrás una etapa de degradación en los últimos años ligada a la actividad de ocio nocturno que ha imperado en la zona y que ha provocado numerosos altercados y conflictos con incluso algún asesinato. La nueva etapa ha podido ponerse en marcha después de que el Govern de la Generalitat acordara ceder las competencias de gestión del espacio al Ayuntamiento de Barcelona y que el consistorio de Ada Colau haya expropiado a buena parte de los locales.

Así pues, el nuevo Port Olímpic avanza en el objetivo de convertirse en lo que las fuentes municipales definen como "un espacio de referencia en la vida ciudadana, con la náutica popular, el deporte y la divulgación como actividades centrales y con nuevos espacios vinculados a la promoción económica y de fomento a la economía azul". Recientemente la Comisión de Gobierno municipal ha aprobado dos de los proyectos primordiales de su transformación: la adecuación de los locales de los muelles y diques de Mestral y de Recer, así como su urbanización.

Uno de los objetivos fundamentales es hacer que el puerto de ocio de la capital catalana se integre con la ciudad, haciéndolo más accesible a la ciudadanía, especialmente en los barrios del próximo distrito de Sant Martí, más amable y con más zonas para el encuentro ciudadano y los usos sociales y cotidianos de la ciudad. Además, estos dos espacios, el Moll de Mestral y el Dic de Recer acogerán los usos y las actividades centrados en la llamada economía azul -actividades económicas y empresariales relacionadas con el mar- en el Port Olímpic, para convertirse en "un nuevo punto de actividad diaria, productiva, sostenible e innovadora que le convierta en un puerto vivo", aseguran desde el Ayuntamiento.

Moll de Mestral, polo de la economía azul

El Moll de Mestral, con una superficie construida de casi 4.000 metros cuadrados, acogerá el polo de economía azul del Port Olímpic, que incluirá un salón de actos para 150 personas y varios espacios anexos donde se concentrarán locales de economía azul, locales de actividad náutica y espacios propios del puerto, como salas técnicas o de centralización de control y seguridad.

Aparte de la adecuación de los locales, está previsto también habilitar en este muelle un espacio de paseo que pacifique la zona, con la instalación de una pérgola, hecha con madera tecnológica, que generará un espacio pensado para la estancia y el disfrute de la ciudadanía, con zonas verdes y zonas de sombra. Este proyecto supone una inversión de 10,4 millones de euros.

Urbanización del Dic de Recer, un espacio de paseo y estancia

También se ha aprobado el proyecto referente a la adecuación de la zona del Dic de Recer, en un ámbito aproximado de 2.500 metros cuadrados, generando en este dique un espacio para acoger diferentes servicios propios de la actividad náutica y orientado, como el Moll de Mestral, hacia la economía azul.

El proyecto contempla la urbanización interior y superior del Dique, en las cotas muelle y ciudad. La urbanización del Dic de Recer responde a la voluntad de acercar la ciudadanía al Port Olímpic, generando un espacio de paseo y estancia, y así la zona volverá a ser completamente accesible, con una plataforma única en cota puerto, pero también más permeable con la generación de nuevos accesos intermedios en el dique, que conectarán la zona de paseo de cota ciudad con la cota puerto. Entre la edificación y la urbanización del espacio, el ámbito de proyecto será de casi 9.500 metros cuadrados, destinando una inversión aproximada de 11,4 millones de euros.

Una inversión total de 40 millones de euros en seis años

El desarrollo del nuevo modelo del Port Olímpic comportará una inversión total de más de 40 millones de euros, que se llevará a cabo durante los próximos 6 años sin detener la actividad cotidiana que se desarrolla en él. Las obras aprobadas por valor de 21,8 millones de euros se iniciarán el próximo abril, con previsión de que finalicen durante el primer trimestre de 2023.

Con este proceso de transformación, el Port Olímpic impulsa un nuevo modelo de usos y actividades centrados en la economía azul, entendida como una economía vinculada al mar, no contaminante, eficiente en el uso de recursos y basada en los modelos de producción y consumo sostenibles, "que mejoren el bienestar y la equidad social, contribuyendo al crecimiento económico, y reduciendo significativamente los riesgos ambientales y la escasez ecológica", aseguran las fuentes municipales. El nuevo Port Olímpic permitirá una actividad diaria productiva con la generación de 250 nuevos puestos de trabajo vinculados a este sector económico en un espacio de más de 7.800 metros cuadrados.

Expropiaciones

El proceso de remodelación se ha podido activar después de que el Ayuntamiento de Barcelona ha recuperado la posesión de la totalidad de los locales situados en la zona. Solo en el Moll de Mestral del Port Olímpic se han recuperado, con autorización judicial, 44 locales, 26 de forma forzosa y 18 mediante la fórmula de entrega voluntaria que el Ayuntamiento facilitó.

Actuación en el Besós con naves industriales

Por otro lado, en este proceso de regeneración y revitalización económica de zonas degradadas de la ciudad, el Ayuntamiento de Barcelona también ha acordado la compra de dos naves industriales en el Besòs. Actualmente las naves se encuentran vacías y el consistorio quiere adquirirlas para destinarlas a proyectos de impulso de la economía circular y sostenible y mejorar la competitividad empresarial del entorno.

El Ayuntamiento ha invertido más de 5 millones de euros en la adquisición de ambos espacios y el proceso de compra finalizará entre febrero y junio de 2022, momento en el que empezará también la selección de operadores que deben impulsar proyectos tractores. Una de las naves tiene 1.850 metros cuadrados y está ubicada en la calle Costa Brava mientras que la otra tiene cerca de 3.400 metros cuadrados y está en la calle Ciutat d'Assumpció.

La iniciativa se enmarca dentro de la estrategia municipal para relanzar la actividad económica en los polígonos del Besòs a través de la compra de naves vacías y la implantación de actividad de interés.