El Papa lamenta que Occidente esté "aburrido" de la fe
El Pontífice destaca los "ejemplos luminosos de fe" pese a la "vergüenza de nuestros errores"
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Benedicto XVI ha celebrado este jueves por la mañana la tradicional misa del Crisma y ha declarado en la homilía que "Occidente, los países centrales del cristianismo están cansados de su fe y aburridos de su propia historia y cultura" porque "no quieren conocer la fe en Jesucristo".
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Por ello, el Papa ha subrayado que la Iglesia "tiene motivos para gritar a Dios" que "no permita que los cristianos se conviertan en no-pueblo" y puedan "reconocer a Dios de nuevo" para que "den testimonio de su mensaje con alegría".
El Pontífice ha añadido que, "no obstante toda la vergüenza de nuestros errores, no se debe olvidar que también hoy existen ejemplos luminosos de fe" y "también hay personas que, mediante su fe y su amor, dan esperanza al mundo".
Benedicto XVI ha destacado que "Dios mismo se ha puesto a buscar" a los hombres y que el hecho de que Dios mismo se haya hecho hombre en Cristo "muestra lo mucho que Dios ama al hombre, su criatura".
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Cristo, ha explicado el Pontífice, "sale al encuentro de la inquietud del corazón, de la inquietud de preguntar y buscar, con la inquietud de su mismo corazón" que lo induce "a cumplir por los hombres el gesto extremo" de la Cruz.
El Papa ha recordado a los fieles que deben "estar en camino hacia Cristo, para conocerlo mejor, para amarlo mejor" y ha invitado a los cristianos que "permanezcan siempre catecúmenos" porque "el conocer a Dios no se acaba nunca".
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El Pontífice ha insistido también en que "la curación del corazón herido de los hombres" es un encargo "primordial que Jesús ha confiado a la Iglesia". Por eso, ha recordado Benedicto XVI, la primera y fundamental curación "sucede en el encuentro con Cristo que reconcilia al hombre con Dios y sana su corazón desgarrado".
Por último, Benedicto XVI ha agradecido "a las hermanas y hermanos que llevan este amor curativo a los hombres por todo el mundo, sin mirar a su condición o confesión religiosa" y que "en virtud de la fe y del amor, se ponen al lado de los que sufren" para "dar testimonio de la bondad de Dios".