IU señala que no hay margen de negociación sobre las pensiones
Lara marca diferencias con CCOO y UGT y dice que no deben ligarse retiro y reforma laboral
Publicidad
La negociación de Gobierno, sindicatos y patronal sigue aún abierta en canal, sin que aún pueda vislumbrarse si logrará cuajar. Por lo pronto, Izquierda Unida no ha rebajado un ápice sus exigencias. Según aseguró ayer taxativo el coordinador, Cayo Lara, la federación "no estará en ningún pacto" que suponga aumentar la edad de retiro, incrementar el número de años que se toman como base para calcular la pensión o subir la cantidad de años de cotización necesarios para obtener la jubilación máxima. Unas "líneas rojas", abundó, que su formación no traspasará en ningún caso. Por tanto, IU considera que "no quedan huecos" para el acuerdo. "La negociación es ahora mismo cero", remachó.
Publicidad
Su sentencia, rotunda, sonaba a una cierta diferenciación respecto a las conversaciones en las que CCOO y UGT se han embarcado con el Ejecutivo, y en las que se ha puesto sobre la mesa las pensiones y el desarrollo de la reforma del trabajo, que podría conllevar un endurecimiento de las condiciones del despido barato. Lara señaló que no comparte que se "vinculen" ambos temas, que en su opinión deben abordarse de forma "disociada". Como propuestas, IU plantea que, para que gane ingresos la Seguridad Social, deberían equipararse los sueldos de hombres y mujeres o incentivar el empleo a través del sector público.
IU parte de la base de que no es necesario tocar ahora las jubilaciones, puesto que el sistema es sostenible. Como reiteró el líder, la "única" pretensión del Ejecutivo es "fortalecer los planes privados de pensiones". Recordó que ningún partido incluyó en su programa electoral la reforma del sistema, así que aquellas formaciones que la defiendan deberían "incorporarla" a sus promesas en las siguientes generales, para que los ciudadanos "decidan".
La federación respeta la "soberanía" de los sindicatos y apoyará "las conquistas" a favor de los trabajadores que arranquen CCOO y UGT. Sin embargo, algunos dirigentes se muestran extrañados por la actitud de las centrales. "Conste que mantenemos una relación excelente, pero se están equivocando. ¿Qué sentido tiene negociar ahora con un Gobierno que se hunde, y que arrastrará con él a todos los que pacten con él?", comentaba "a título personal" una responsable de la dirección. Otro compañero, más cauto, no veía el "sentido" de acercarse a un Ejecutivo "que no se esfuerza en ganar las elecciones", pero asumía que los roles y las "dinámicas" de los sindicatos y los partidos son "distintos".
Publicidad
En todo caso, IU no está hablando de este tema con el Gobierno. Es más, Lara denunció que nadie se ha puesto en contacto con su formación.