"El Gobierno no se pone en el lugar de los ciudadanos con problemas"
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"Nos apoyamos entre nosotros y estamos muy unidos, porque si no estaríamos en manos del Gobierno, y ellos no se ponen en el lugar de los ciudadanos con problemas", afirma José Alberto Lario, uno de los portavoces de la Asamblea de vecinos de Lorca Afectados por el terremoto.
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Los vecinos de la localidad murciana de Lorca viven este domingo el tercer aniversario de los terremotos que dejaron 9 fallecidos y 324 heridos en 2011. Pasados tres años, aseguran que sienten un "desamparo tremendo" por parte del Gobierno. "Con el resto de España no tenemos problema", cuenta Lario a Público, "hoy en día vivimos muy rápido y tendemos a olvidar. Pero el Gobierno nos tiene desamparados".
Están "cansados, hartos de exigir unas ayudas que son públicas y que tienen que ir a parar ya a sus destinatarios". "No hay más excusas", declara Lario, "es dinero público". Parte del problema, asegura, es que "el Gobierno anterior aprovechó las elecciones" que se celebrarían en noviembre de 2011 "para hacer promesas que no podía cumplir", en concreto, "prometer un dinero que no podía pagar". Este vecino de Lorca remarca que "tienen tanta culpa unos como otros, tanto los que gobernaban entonces como los que lo hacen ahora".
El portavoz de la Asamblea tiene claro que, para Lorca, la Mesa solidaria "es fundamental". Esta Mesa, que sirve para organizar y canalizar las donaciones provenientes de diversos puntos de España para que lleguen a los damnificados, "ha paliado las faltas de la Administración Regional", suponiendo una gran ayuda para aquellos que no están recibiendo las indemnizaciones que les corresponden.
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Lario denuncia que, si volviera a ocurrir algo parecido a lo que ocurrió el día de los terremotos en Lorca, los lorquinos se verían de nuevo desamparados. "Volvería a pasarnos lo mismo", afirma, refiriéndose al retraso en el pago de las indemnizaciones, en las reconstrucciones y en la ayuda del Gobierno en general. "La ley no se ha modificado" a este respecto, recalca, así que la situación sería exactamente la misma.
Por otro lado, afirma que el problema no sería tan grave en lo que a infraestructuras se refiere. "Las nuevas construcciones respetan las normas antisísmicas", asegura, y se muestra contento con este hecho. "Para eso están las desgracias, para aprender de ellas". Así, concluye que Lorca ha salido bien preparada de la tragedia en el ámbito de las infraestructuras, pero no en cuanto a las leyes y el amparo del Gobierno.